La Cámara de Diputados aprobó ayer con amplio margen y giró al Senado el proyecto de ley para prorrogar la emergencia alimentaria, luego de un debate rápido y con discursos medidos tanto del oficialismo como de la oposición. Con 222 votos a favor, 33 ausentes y solo una abstención (de la diputada de la Izquierda Mónica Schlotthauer) la Cámara baja aprobó la iniciativa impulsada por la oposición, que establece un aumento del 50% como mínimo de los créditos presupuestarios vigentes correspondientes a los distintos programas de alimentación.
Ahora, la iniciativa quedó lista para ser discutida en el Senado, donde se convocará a una sesión especial para el próximo miércoles para ratificar la nueva ley. La de ayer fue una discusión corta, que duró poco menos de tres horas, una brevedad que se explica por el acuerdo al que llegaron el oficialismo y la oposición para llevar adelante un debate con pocos oradores y evitando las críticas subidas de tono y los cruces verbales, teniendo en cuenta la contienda electoral en que se encuentran las fuerzas políticas.
Si bien no faltaron los pases de factura, principalmente por parte de la oposición contra el Gobierno por la política económica, la sesión transcurrió en un clima muy parecido al de una tregua, mientras en la puerta del Congreso se manifestaban diversas agrupaciones sociales y políticas. “Inclusive no compartiendo cosas que se han dicho, hemos estado a la altura de las circunstancias de cara a la sociedad”, reflexionó el jefe del interbloque Cambiemos, Mario Negri.
Por su parte, el jefe del bloque del Frente para la Victoria, Agustín Rossi, sostuvo que el proyecto viene a “dar una respuesta por parte del Estado” frente a una demanda que surgió de diversos sectores, desde la CGT hasta la iglesia y agregó: “Todos hemos recibido registros de lo que sucede en la Argentina con el aumento de los alimentos”.
A su turno, el jefe del bloque Movimiento Evita, Leonardo Grosso, principal impulsor del proyecto y de la convocatoria a la sesión especial aprovechó el debate para cruzar al candidato a vicepresidente de Juntos por el Cambio, Miguel Ángel Pichetto, quien consideró que “Argentina tampoco es Biafra”, al referirse al reclamo por la emergencia alimentaria. En su discurso durante la sesión, el legislador lanzó: “El senador Pichetto tiene razón, esto no es Biafra, esto es la Argentina de Mauricio Macri y de Cambiemos”.
La ley establece la reasignación de partidas
El proyecto de Emergencia Alimentaria aprobado dispone la prórroga hasta el 31 de diciembre de 2022 de la emergencia alimentaria nacional. Se trata de una prórroga porque durante la crisis de 2002 el presidente Eduardo Duhalde declaró la emergencia alimentaria, que luego fue discontinuada. Ahora, el proyecto sancionado en Diputados propone reimplementarla.
Vale recordar que desde 2016 y hasta el 31 diciembre de 2019 está vigente otra emergencia: la social, que también permite reasignar partidas en materia alimentaria pero no es tan específica como la propuesta actual. Se estima que implicará un desembolso cercano a los 10.000 millones de pesos, pero al realizarse por reasignación de partidas no generaría un aumento del déficit por nuevos gastos.
De acuerdo a estimaciones de la Oficina de Presupuesto del Congreso, el crédito vigente al 31 de agosto es de 20.977 millones de pesos, y la iniciativa dispone un aumento de como mínimo el 50% de esos recursos presupuestados.