En medio de la puja salarial con los gremios estatales y como gesto para intentar descomprimir el conflicto en vísperas del inicio formal de la campaña electoral, el gobierno de Córdoba suspendió hasta el 31 de diciembre del presente año el diferimiento de las subas que perciben los activos para aquellos jubilados y pensionados provinciales cuyos haberes correspondientes a febrero no superaron los 250.000 pesos.
Como se sabe, el diferimiento de los aumentos a los jubilados fue dispuesto en el marco del ajuste previsional de 2020 y originalmente era por 60 días. Con la intensificación de la inflación, esa medida fue representando un perjuicio cada vez más elevado para los pasivos y era parte central del reclamo de los sindicatos estatales.
Según se informó desde el Centro Cívico, la disposición rige retroactivamente a marzo y beneficia a más de 87.000 jubilados y pensionados, lo que representa el 80% de los pasivos de la Caja Provincial. De esta manera, ese segmento de jubilados y pensionados cobrará los aumentos el mismo mes en que los perciban los trabajadores activos.
Las condiciones ya habían sido flexibilizadas para este sector, cuyos haberes ya no tenían actualizaciones diferidas por 60 días sino que se pagaban al mes siguiente de que los activos. Ahora lo harán en simultáneo, tal como lo establece la ley provincial número 8.024.
Dado que la eliminación del diferimiento será retroactiva, el viernes próximo se abonará por liquidación adicional el monto correspondiente al mes de marzo a todos los jubilados provinciales que perciben menos de 250.000 pesos. Ese pago adicional oscilará en el 10% del total del sueldo de marzo.
Según se explicó desde la Provincia, el gobernador Juan Schiaretti tomó esta decisión luego de conocer los números de la inflación de este mes y evaluar las proyecciones de los próximos meses. Todo indica que además lo hizo en señal de distensión con los estatales, en especial con los docentes. En la actualidad, y hasta principios de mayo rige una conciliación obligatoria que impide nuevos paros en las escuelas provinciales, y el fin del diferimiento era un reclamo central de la Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba (UEPC).
En efecto, la medida beneficia principalmente al sector docente, que tiene casi 40.000 jubilados. En su inmensa mayoría esos pasivos cobran menos de 250.000 pesos, reveló ayer en un informe el diario La Voz del Interior. Dicha disposición también es muy importante para los jubilados del Sindicato de Empleados Públicos (SEP).
El gremio que conduce el legislador oficialista José Pihen protagonizó el viernes último un enfrentamiento con la Policía en las inmediaciones del Panal y elevó la tensión que domina a los estatales por la demora en el acuerdo paritario.
La suspensión del diferimiento también era reclamada por el propio oficialismo de Hacemos por Córdoba, en vistas del riesgo que los conflictos gremiales crecientes representan para la campaña política en ciernes. El propio candidato a gobernador, el intendente Martín Llaryora, en las últimas semanas inició gestiones ante Schiaretti en procura de la eliminación de esa medida, resistida en el equipo de Finanzas de la Provincia.
Los técnicos del sistema previsional sostienen que los jubilados que perciben menos de 250.000 pesos y que recibían los aumentos al mes siguiente que los activos no tenían diferimiento. En realidad, consideran que el cobro simultáneo con los activos representa una anticipación, ya que la mayor erogación previsional se genera antes que el ingreso de los mayores aportes por el incremento salarial de los activos.
La discusión quedó saldada por la decisión de Schiaretti, que optó por suspender hasta fin de año todo diferimiento y dejar en manos de su sucesor la medida de fondo al respecto. La Caja de Jubilaciones volvió a representar un problema para la Provincia por la inflación, y en especial por la desactualización de los envíos de Anses para cubrir el déficit. Hace dos semanas, la Provincia inició una demanda en la Corte por esa deuda.