En lo que fue la primera visita de un mandatario al histórico edificio de la calle Azopardo 802 en once años, el futuro jefe de Estado recibió un importante respaldo de la central obrera, que también vio el regreso del camionero Hugo Moyano a su sede a más de tres años de su renuncia como secretario general de la entidad.
«En este lugar Perón llamó a un pacto social, en tiempos en que la Argentina estaba en crisis y necesitaba del acuerdo de todos los argentinos. El mandato de Perón está más presente que nunca: para un argentino no hay nada mejor que otro argentino», sostuvo el dirigente peronista.
En su discurso en el Salón Felipe Vallese, Fernández subrayó: «Vamos a honrar la memoria de Perón y vamos a volver a llamar a los que producen y trabajan y se van a sentar con el Estado a diseñar las políticas del futuro. No solamente a hacer un acuerdo de precios y salarios, sino a diseñar el futuro que la Argentina necesita y vamos a hacerlo entre todos. Son políticas que van a perdurar más allá de mi mandato».
Ante los principales líderes sindicales, el sucesor de Mauricio Macri remarcó que «el movimiento obrero organizado es parte del Gobierno que se va a instalar en la Argentina el 10 de diciembre» y añadió: «No es un acuerdo político, nunca lo hemos hablado. Es la convicción que siempre tuvimos: que al país lo arreglamos entre todos, trabajando juntos y los que trabajan son la piedra angular de esta sociedad».
Además de recordar a Saúl Ubaldini y a José Ignacio Rucci, insistió en que «el movimiento obrero tiene mucho que ver» con el trabajo que se necesitará.
«Estoy seguro que quienes están sentados a mi lado quieren esa Argentina integrada que yo quiero. Quieren aportar al futuro. Es el mismo compromiso que encuentro en los gobernadores, el mismo que encuentro en Cristina (Kirchner) cada vez que hablo con ella, y en cada legislador al que le planteo mis dudas y en los grandes hombres de la política. Si todos estamos de acuerdo, pongámonos a trabajar ya y la Argentina va a tener el futuro que nos merecemos. Feliz de estar en la CGT, feliz de estar en la casa de los trabajadores», añadió.
Asimismo, propuso que la sede de la CGT «se convierta en un centro de capacitación tecnológica para los que trabajan» y que forme a los “jóvenes para que tengan un futuro en un mundo que se tecnologiza”.
“Estamos en tiempos en que la Argentina necesita volver a ponerse de pie porque, por más que escriban informes, todos saben cómo se degradó la economía y la educación en Argentina”, sostuvo.
Previamente, los secretarios generales de la central obrera, Héctor Daer y Carlos Acuña, habían manifestado el respaldo del sindicalismo al futuro Gobierno.
«Me preguntan si vamos a acompañar y yo respondo: No somos terceras personas. Somos parte del Gobierno que viene. La esperanza se hace sólida en esta foto de unidad, con los gobernadores, los intendentes y todos. Bienvenido a tu casa, sentila como tu casa. El peronismo es los trabajadores», señaló el líder del Sindicato de Sanidad.
Por su parte, Acuña manifestó: «Ahora viene otra etapa, que es la más difícil, pero en la que vamos a seguir más unidos que nunca y vamos a sacar al país adelante».
Además del mandatario electo y los sindicalistas, en el Salón Felipe Vallese también estuvieron presentes dirigentes como Gustavo Béliz, Eduardo «Wado» De Pedro, Sergio Massa y los gobernadores de San Juan, Sergio Uñac; de Tucumán, Juan Manzur; y el mandatario bonaerense electo, Axel Kicillof, así como varios intendentes del Conurbano.