El viceintendente y jefe municipal electo, Daniel Passerini, vivió una dramática situación el pasado fin de semana al encontrarse en Israel al inicio del atentado de la organización terrorista Hamás.
El funcionario -quien en la víspera ya estaba en Madrid- realizaba un viaje para participar de una actividad oficial en Jerusalem cuando se registraron los trágicos hechos en ese país de Medio Oriente. Passerini contó ayer en primera persona cómo se vivió el bombardeo y los controles severos que iniciaron a la par.
“Llegué a Tel Aviv el día viernes con una situación de total normalidad y el sábado a la mañana nos despertamos con las alarmas. No entendíamos nada, nos decían que teníamos que irnos al subsuelo del hotel, a un refugio, porque había un alerta de bombardeo”, relató el Viceintendente en declaraciones a Radio Universidad.
En ese marco, contó que debieron permanecer durante varios minutos en ese refugio mientras se activaba en Israel el sistema antimisiles. Frente a esta inédita situación, Passerini comentó que tras esperar solo 20 minutos en ese sitio los pasaron a buscar para viajar a Jerusalén. “En el transcurso del viaje hubo algunos incidentes y nos obligaron a detenernos, había retenes del ejército y a los autos sospechosos los paraban, los apuntaban y los hacían bajar”, describió, y luego resaltó: “Es una situación a la que uno verdaderamente no está acostumbrado a ver”.
Tras esa situación, señaló que las alarmas volvieron a sonar cuando llegaron a Jerusalén. El funcionario detalló que pudo ver misiles y el surco de humo en el cielo, por lo que tuvieron que bajar del auto y permanecer en el suelo. “Por suerte ninguno de esos misiles cayó en la ciudad”, comentó. En ese marco, Passerini permaneció en el hotel y pudo concretar algunas actividades el domingo. Además, contó sobre el dolor de los locales que se iban enterando de las consecuencias del conflicto. “Una situación totalmente inesperada, triste, dolorosa, que ojalá jamás en mi vida vuelva a ver”, afirmó el sucesor de Martín Llaryora.
El municipio y la Cañada, iluminados
La Municipalidad de Córdoba iluminó el lunes el Palacio 6 de Julio y la Cañada con los colores de la bandera de Israel en apoyo y solidaridad tras el ataque terrorista del grupo Hamas.
El pasado sábado se vivió el mayor ataque contra la nación mencionada, liderada por Benjamín Netanyahu. Por lo que, según lo informado a través de un comunicado de prensa, el gobierno decidió iluminar con azul y blanco como gesto simbólico de acompañamiento a la comunidad judía.
El intendente Martín Llaryora ya se había pronunciado en sus redes sociales el mismo día del atentado, donde transmitió su repudio y condena.
“La paz y el diálogo son el único camino para la solución de cualquier conflicto. La humanidad debe unirse para reclamar por el fin de los atentados cuyas únicas víctimas son civiles inocentes”, expresó. Esta iluminación se suma a otras instituciones o monumentos que han tomado la misma iniciativa solidaria en varias capitales del mundo. Por otro lado, el gobierno decidió reforzar también la seguridad en las instituciones de la comunidad judía.
La Daia reclamó una sanción para Echevarría
La Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (Daia) envió una carta a la Legislatura de Córdoba pidiendo que se analice un escrito publicado en las redes sociales por la parlamentaria Luciana Echevarría, del Frente de Izquierda.
El lunes, Echeverría escribió en la cuenta social X un posteo donde compartía un artículo de la Liga Internacional Socialista titulado “Solidaridad con las masas palestinas. Por una Palestina única, laica, democrática y socialista”. Al lado, la legisladora escribió “Apoyo incondicional al pueblo palestino. Rebelarse contra la opresión es un derecho”.
En ese marco, y en respuesta al mensaje, la Daia filial Córdoba envió una carta a las autoridades de la Legislatura provincial solicitando que se analicen los dichos de la representante del Frente de Izquierda y que de ser necesario “procedan a la aplicación de las sanciones que estime corresponder”.
Además, la carta añade: “Sus dichos afectan gravemente al pueblo de Israel y a todas aquellas personas que nos consideramos fervientes luchadores de la paz. Promover la defensa de organizaciones terroristas por parte de alguien que es representante del pueblo sin dudas constituye una grave falta a sus deberes de funcionario público”.