Las altas temperaturas en esta época del año generan que las pulgas y garrapatas tengan una mayor proliferación. El calor reactiva el metabolismo de estos parásitos que encuentran en esta época del año el mejor ambiente para asentarse, reproducirse y actuar, haciendo que tanto perros como gatos estén propensos a contagiarse con más facilidad.
En verano, una pulga en un día puede poner 50 huevos que pueden vivir hasta más de cinco meses. Estos parásitos pueden encontrarse en los parques, veredas, tierra y hasta rincones de la casa.
El mayor problema de la presencia de pulgas y garrapatas en la casa es la posible transmisión de enfermedades, tanto a humanos como a las mascotas.
Para evitar su aparición, los mejores consejos son aspirar las alfombras y los muebles por donde se mueven nuestras mascotas, sacudir sus alfombras y mantitas.
Por otro lado, existen diversos insecticidas y productos para eliminarlos rociando por las zonas afectadas.
En cuando a las mascotas, la mejor forma de protegerlas es respetando su calendario de desparasitación, utilizando productos destinados a ella como pipetas y collares antipulgas, que también los protegerán contra otros parásitos como los mosquitos.