El ex presidente estadounidense Donald Trump ganó con holgura las primarias del estado de New Hampshire, un nuevo triunfo en el arranque de la temporada de internas con el que ya acaricia la candidatura presidencial del Partido Republicano para volver a enfrentar al presidente Joe Biden en las elecciones generales de fin de año.
En su segunda victoria tras las dos primeras internas, Trump superó ayer a la única rival que le queda, la ex embajadora ante la ONU Nikki Haley, por 54,6% de los votos contra 43,2%, en un duro revés para una precandidata que había invertido mucho tiempo y recursos financieros en New Hampshire, un pequeño estado del noreste del país.
Haley, de 52 años y ex gobernadora de Carolina del Sur, felicitó anoche a su adversario por su victoria, pero afirmó que “la carrera está lejos de haber terminado” y advirtió a los republicanos de que convertir a Trump en candidato significará una “victoria para Biden” en las elecciones generales del 5 de noviembre. El magnate republicano quiere revancha con Biden desde su derrota electoral en noviembre de 2020 con el presidente demócrata, que nunca reconoció.
Cuatro juicios penales y varias demandas civiles que pesan sobre él no han mellado su gran popularidad entre los sectores más conservadores del Partido Republicano, y su triunfo hace que su tercera nominación a presidente y un nuevo duelo con Biden en las urnas parezcan aún más inevitables.
En su discurso de victoria, Trump, de 77 años, volvió a burlarse de Haley, instándola a retirarse. También arremetió contra Biden, diciendo que era el “peor presidente de la historia” de Estados Unidos, un país al que describió como “en decadencia”.
“No permitamos que alguien se lleve una victoria cuando tuvo una noche muy mala”, dijo Trump. Y añadió: “Sólo una pequeña nota para Nikki: no va a ganar”.
En un comunicado, Biden advirtió que la democracia y las libertades individuales están “en juego” y dio por casi seguro que Trump “será el candidato republicano”.
Biden se impuso pese a no figurar en las boletas
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ganó en las elecciones del martes el voto demócrata en las primarias de Nuevo Hampshire, a pesar de que su nombre no figuraba en las papeletas, lo que supone una importante demostración de fuerza.
Según Edison Research, Biden se impuso a dos demócratas que sí figuraban en la papeleta: el representante de Minnesota Dean Phillips y la autora de libros de autoayuda Marianne Williamson.
La victoria del actual presidente fue el resultado final de una ferviente campaña de voto por escrito —los votantes podían escribir el nombre en la casilla reservada para ello— orquestada por los demócratas de Nuevo Hampshire, preocupados por la decisión del partido nacional de enviar las primeras elecciones primarias del estado a Carolina del Sur, un estado más diverso.
“Quiero dar las gracias a todos los que han escrito mi nombre esta tarde en Nuevo Hampshire. Ha sido una demostración histórica de compromiso con nuestro proceso democrático”, dijo Biden en un comunicado. Biden obtuvo cerca del 68% de los votos, con el 40% de los escritos escrutados, mientras que Phillips obtuvo cerca del 20%.