Un hombre de 71 murió ayer, luego de recibir una descomunal golpiza que lo dejó tendido en el piso con la nariz hundida en el cráneo. El hecho tuvo lugar el 25 de este mes a la madrugada en barrio Alta Córdoba, y se presume que se trató de un robo efectuado por cuatro conocidos de la víctima.
Tras pasar cuatro días internado en un sanatorio, producto de graves heridas en su cabeza, Raúl Héctor Peralta, quien fue a comprar cigarrillos a altas horas de la madrugada, murió ayer. Según la primera información, el hombre superó las cirugías que le permitieron sobrevivir al ataque, pero fue afectado por un virus intrahospitalario que agravó su cuadro clínico y le ocasionó la muerte.
El hombre llegó al centro médico con la nariz hundida y el cráneo partido a la altura de la frente, según la información que brindaron familiares de la víctima y, entre otras cosas, hubo que extraerle un coágulo de sangre producido por los golpes que había puesto en peligro su cerebro. Fue su hermano Juan quien lo encontró desvanecido y ensangrentado en la esquina de las calles Tucumán y pasaje Usandivaras y llamó a la Policía y a un servicio de emergencias que, según indicó, demoraron más de una hora en llegar al lugar.
El hecho tuvo lugar alrededor de las 2.40, cuando Peralta salió de su casa para comprar cigarrillos y fue interceptado por un grupo de personas que le propinó la golpiza. Según indicó Juan a La Voz, unas cuatro personas rodearon a Raúl y comenzaron a pegarle hasta dejarlo tirado en el piso, para robarle una riñonera que tenía el hombre, donde llevaba $ 5.000, un documento viejo y tarjetas de débito o crédito.
Hasta el momento, todo indica que los agresores de la víctima eran sus conocidos. A este dato, el hermano de Raúl agregó que este le prestaba dinero a los jóvenes como actividad habitual.
La fiscal Silvana Fernández tuvo a su cargo las primeras actuaciones en el marco de la investigación, que desde hoy quedará en manos de su colega Iván Rodríguez. De momento, Fernández ordenó la autopsia y delegó una investigación a la División Robos y Hurtos de la Policía de Córdoba.
Además, la causa avanza en la búsqueda de testimonios, grabaciones de cámaras de seguridad y otros indicios que puedan dar cuenta de lo que ocurrió en los momentos previos a la brutal golpiza que sufrió el jubilado.