Por las condiciones climáticas, léase falta de viento, Mateo Majdalani y Eugenia Bosco no pudieron correr ayer la medal race de la categoría Nacra 17 y la definición se pasó para hoy a las 7:18. Fue otro día de sol penetrante en Marsella, de poco viento en las canchas del hermoso Nautique du Roucas Blanc. De angustia, además, porque la carrera se corría y no; se suspendía o se postergaba.
“No se imaginan el trabajo que hicieron estos chicos para estar acá”, decía Diego, español y pareja de Eugenia, desde uno de los sectores especiales preparados para los familiares. “Merecen lo que les está pasando. Vaya si lo merecen”, casi que gritaba colgado a una de las vallas. No estuvieron en peligro ni en malas condiciones Mateo y Eugenia, pero las más de dos horas que pasaron esperando una largada que no fue tiene su peculiar historia.
“Son deportistas de alto nivel y están acostumbrados a estar en el agua”, dijo al pasar Santiago Lange, medalla de oro en Río de Janeiro 2016. “Son cosas que sabemos que pueden pasar. La idea estando adentro del mar es estar en estado de alerta, pensando que en cualquier momento van a dar la señal de partida. Es peligroso creer que se puede suspender porque te pueden dar la orden y estás unos cambios abajo”, contó Majdalani.