Andrés Manuel López Obrador aseguró ayer irse “muy contento” de la presidencia de México por los logros que asegura consiguió su gobierno y porque hoy entregará el relevo a su aliada Claudia Sheinbaum.
“Me voy muy contento, también porque voy a entregar la banda presidencial a una mujer excepcional”, dijo en su última rueda de prensa “mañanera” que mantuvo de lunes a viernes durante su mandato de seis años.
La conferencia de prensa de ayer fue especial, porque se convirtió en una fiesta con desayuno incluido. Un sorteo para que un periodista se quede con su reloj, la develación de su retrato en el Palacio Nacional, la sede presidencial y almuerzo con otros mandatarios.
México espera la llegada de 16 mandatarios extranjeros y decenas de invitados especiales para la toma de posesión de Claudia Sheinbaum, que hoy se convertirá en la primera presidenta en la historia del país.
El cubano Miguel Díaz-Canel, el colombiano Gustavo Petro, el brasileño Luiz Inácio Lula da Silva y el chileno Gabriel Boric ya están en la capital mexicana.