Un informe de la consultora Analytica reveló que el gasto de la secretaría de Educación de la Nación se redujo un 56,1% interanual real en septiembre pasado, mientras en los primeros nueve meses del año la caída asciende al 48,6% comparando con el mismo período de 2023. El dato se conoce a días de la votación del veto del presidente Javier Milei a la Ley de Financiamiento Universitario, que actualizaba el presupuesto para la educación terciaria.
Según detalló el informe, el recorte más drástico en la educación pública recayó en las universidades, a partir del ajuste del programa “Desarrollo de la Educación Superior”, que representa el 77% del gasto total de la secretaría. El mes pasado dicho programa tuvo una caída interanual real del 30,5% y en lo que va de 2024 asciende al 30,4%. El 99% del programa se compone de las transferencias corrientes a las universidades.
Por otro lado, las universidades también reciben transferencias de capital, cuya partida más importante es el pago de salarios de los docentes universitarios, cuya contracción fue del 30,3% en 2024.
Sin embargo, se destacan caídas muy pronunciadas en otras partidas como “Fortalecimiento de la actividad extensión universitaria” que no registró transferencias en 2024; o el “Fondo Universitario para el Desarrollo Regional”, que tuvo un ajuste del 94,7% en los 9 meses del año; seguido por “Fortalecimiento de la Ciencia y la Técnica en Universidades” con una reducción del 87,2%; “Desarrollo de Proyectos Especiales” con una baja del 87% y “Desarrollo de Institutos Tecnológicos de Formación Profesional”; con 82,1%, entre otros.
En conjunto, las transferencias devengadas al programa “Desarrollo de la educación superior” en el acumulado de enero a septiembre pasaron de representar el 0,5% del PBI en 2023 al 0,4% en 2024.