La interna peronista no se disipó con la detención de la ex presidenta Cristina Kirchner por la condena en la causa Vialidad. Si bien la confirmación del fallo de la Cámara de Casación Penal devolvió la centralidad política a la líder del PJ, lo cierto es que la imposibilidad de postularse a cualquier cargo la deja al margen del juego político, lo que dificulta su capacidad de imponer candidatos en las listas provinciales.
El centro de la disputa estará en Buenos Aires, eje territorial de su poder, donde el peronismo debe definir sus candidatos en menos de un mes: el 19 de julio es la fecha límite. Acaso por eso el líder de La Cámpora, Máximo Kirchner, y su par del Frente Renovador (FR), Sergio Massa, empezaron el sábado a diagramar el armado de un nuevo frente electoral para los comicios provinciales que llevaría el nombre de “Peronismo”, mientras que el Movimiento Derecho al Futuro (MDF) que lidera el gobernador Axel Kicillof ya se identifica como un espacio diferente, que buscará “construir” un acuerdo con la fuerza emergente.
Según trascendió, el diseño de la alianza entre el kirchnerismo y el massismo se llevará a cabo bajo la “supervisión” del diputado bonaerense Rubén Eslaiman (del FR) y el legislador provincial camporista Facundo Tignanelli. Fuentes de la mesa chica del ex candidato presidencial aseguraron incluso que empezarán las convocatorias a otras fuerzas como Nuevo Encuentro (de Martín Sabbatella), el Partido Solidario (de Carlos Heller), Patria Grande (de Juan Grabois) y varias de las uniones vecinales para avanzar en las tratativas.
La idea es dejar “constituido el sistema de selección de candidatos, acuerdos e incorporación de uniones vecinales a los efectos de dejar garantizada la estructura jurídica para las elecciones de septiembre y octubre”, según detallaron fuentes partidarias. Además, los cerebros detrás del armado tienen planeado definir “una sola junta electoral de validación de candidaturas para las dos elecciones, así como el sistema de alianzas”, mientras que esta semana también convocarán a la sede de la calle Matheu al resto de los espacios del frente para “discutir el nombre de la alianza” y “la estrategia en términos de definición del mensaje de cara a ambas elecciones”.
Fuentes extraoficiales ya anticipan que la directiva de la ex mandataria sería ungir a su hijo Máximo como heredero político, algo que califican como un “potencial desastre” del lado de Kicillof. “Llegó la hora de Máximo de protagonizar, su candidatura en la Tercera Sección es inevitable”, se animó a plantear el ex ministro de Planificación Federal, Julio de Vido, que fue absuelto en la causa Vialidad. El raid mediático que asumió el titular de La Cámpora el fin de semana parece fortalecer esta hipótesis, aunque Máximo se cuidó de anticipar una candidatura suya.
“Conformar solamente un frente anti-Milei no nos va a servir de mucho”, advirtió ayer en un matutino porteño, donde alentó la posibilidad de “generar acuerdos amplios en base a puntos de consensos”, como la revisión del acuerdo con el FMI y el objetivo de “ir hacia un desendeudamiento”.
“Hay que discutir las políticas, porque la tarea no solo es que el 10 de diciembre de 2027 asuma una argentina o un argentino con ideas diferentes a las de este Gobierno, sino que el día que termine su mandato se vaya como se fue Cristina, porque si no pareciera que fuera solo una carrera para llegar a la Casa Rosada”, amplió.
Del lado de Kicillof, sus voceros se limitan a anticipar que “primero tienen que alinearse entre ellos para poder sentarse a negociar con nosotros, que representamos otro espacio”. Por lo bajo, empero, siguen pidiendo que el mandatario tenga supremacía en el diseño de las listas para las ocho secciones electorales de la provincia, si se llega a un esquema de unidad.
“Es la condición, que Axel tenga representación. Todos estamos de acuerdo con que hay que ir en unidad y que es la única forma de mostrar competitividad frente a los libertarios”, afirmó un intendente de peso en el conurbano bonaerense, que forma parte del Movimiento Derecho al Futuro. “Si La Cámpora otra vez va a manejar la lapicera, va a estar difícil la unidad”, sentenció.
Cristina Kirchner llamó a la militancia a “organizarse” y reiteró la consigna: “Vamos a volver”
Críticas a la CGT
El diputado Máximo Kirchner (UxP) cuestionó a las autoridades de la Confederación General del Trabajo (CGT) por su ausencia en la movilización en defensa de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner que tuvo lugar el pasado miércoles en Plaza de Mayo. “Me hubiera encantado que los tres que la conducen vinieran y acercaran su solidaridad, por más que ellos no la quieren a Cristina o no les guste como dirigente o no los represente, cuestión que es absolutamente válida”, sostuvo al respecto en una entrevista, donde agregó: “No me molesta, no me enoja y a nadie debe enojarlo o molestarlo que no se sientan representados por Cristina, pero me parece que les hubiera hecho bien a ellos en su relación con la sociedad”.
Lula dijo que “Cristina lloró”
En medio de las especulaciones por la posible visita de Lula da Silva a Cristina Kirchner la próxima semana, el presidente de Brasil reveló que se comunicó por teléfono con la ex mandataria argentina tras la confirmación de su detención domiciliaria en la causa Vialidad. “El otro día llamé a Cristina Kirchner, que estaba condenada. La llamé para expresarle mi solidaridad, e incluso lloró. Le dije: ‘Cristina, te llamo porque quiero que sepas que mi amistad contigo no se debe a que tú y yo fuéramos presidentes. Mi amistad contigo se debe a que yo soy una persona y tú eres una persona’”, contó en una entrevista.
