El Gobierno de Alberto Fernández terminó de desmantelar la política de presión hacia el régimen de Nicolás Maduro con una decisión sin dudas polémica: retiró la acusación de Argentina ante la Corte Penal Internacional de La Haya por presuntos crímenes de lesa humanidad cometidos por el gobierno de Venezuela.
Fuentes diplomáticas confirmaron que el Gobierno retiró la acusación contra Venezuela en la CPI el 25 de marzo pasado, al día siguiente de que oficializó su salida del Grupo de Lima. La acusación había sido promovida en ese ámbito por el ex presidente Mauricio Macri, que ayer consideró como indignante” a la noticia.
La decisión de priorizar una alianza política con un dictador antes que la vida y los derechos humanos de millones de venezolanos indigna”, sostuvo Macri a coro con las críticas unánimes que la medida generó en la oposición. Juntos por el Cambio (JxC) pidió además citar al canciller Felipe Solá en el Congreso para que explique la postura del país frente a la grave situación que atraviesa Venezuela”.
El presidente reafirmó su apoyo al régimen de Maduro, dejándonos alineados con una dictadura al borde del colapso”, consideró a su vez Patricia Bullrich. La semana pasada, el propio presidente Fernández ya había minimizado los crímenes del Gobierno de Maduro al considerar que el problema de los derechos humanos en Venezuela fue desapareciendo”.
