Los precios de la indumentaria subieron casi un 63% en el último año, muy por encima de la inflación del 51,2. Además, los precios aumentaron casi 45 puntos porcentuales más que la inflación en dos años, mientras en cantidades producidas el sector industrial volvió al nivel de 2019. De esta manera, la industria textil ya recuperó sus niveles de producción que elaboraba en la prepandemia. Y el sector ya puede exhibir una inversión estimada en bienes de capital cercana a los US$ 200 millones.
Mientras los consumidores cuestionan los precios, los fabricantes se defienden: responsabilizan al alza del valor de las materias primas a nivel mundial, el incremento del costo de los fletes internacionales y la depreciación del peso.
Sin embargo, entidades de defensa del consumidor advierten que los fabricantes están aprovechando el cierre de importaciones para remarcar precios. Sostienen que las restricciones al ingreso de productos desde el exterior fue aprovechado para aumentar los márgenes de ganancia. El cepo cambiario le permitió a las empresas la compra de insumos a un dólar oficial y luego la implementación de los precios de los bienes fijados al ritmo del dólar blue, plantean.
La producción de prendas de vestir, cuero y calzado creció 58,1% en el período acumulado a octubre de este año respecto del mismo lapso de 2020, según datos que difundió el Indec. En cuanto a los precios, la suba fue del 139,4% entre noviembre de 2019 y el mismo mes de 2021, frente a un aumento del 94% en el nivel general.
Desde la Fundación ProTejer destacaron que tras “cinco años de crisis y fragilidad financiera, y frente a un mejor contexto macroeconómico y mejores expectativas a futuro, las empresas comenzaron a repuntar y recompusieron el margen de rentabilidad anterior”. Argumentan que si bien ahora los precios superan a la inflación, entre fines de 2016 y 2021 aumentaron muy por debajo.
Y sostienen que los márgenes con los que trabajan “se encuentran en rangos normales”. “Son compatibles con las inversiones que se requieren para atender las nuevas exigencias del mercado y continuar sustituyendo importaciones”, afirmó la entidad que agrupa a las principales empresas de la industria textil del país.