La contaminación por plástico es una crisis global que afecta a todos los ecosistemas. Si bien la atención se ha centrado en los océanos, los ambientes de agua dulce también sufren las consecuencias de la acumulación de microplásticos. Estos fragmentos, de menos de 5 mm, provienen de la degradación de plásticos más grandes (microplásticos secundarios) o son fabricados en ese tamaño para productos comerciales (microplásticos primarios).
La investigación sobre microplásticos en agua dulce es relativamente reciente, especialmente en el hemisferio sur. La falta de datos dificulta la comprensión del problema y la implementación de soluciones efectivas.
MappA: Una Red para Monitorear la Contaminación
En Argentina, la Red MappA (Monitoring and Analysis of Plastic Pollution in Aquatic Environments) se ha propuesto llenar este vacío de conocimiento. Conformada por más de 50 especialistas, incluyendo grupos de investigación de la UNC y Conicet, MappA está llevando a cabo el primer monitoreo integral de microplásticos en ecosistemas de agua dulce del país.
El proyecto, coordinado por María Belén Alfonso desde la Universidad Kyushu de Japón, busca implementar una metodología estandarizada para detectar la presencia, características y distribución de microplásticos en 117 sitios de 18 provincias. La estandarización es crucial para comparar resultados y obtener una visión global del problema.
Córdoba: Un Espejo de la Diversidad Argentina
En la provincia de Córdoba, el Nodo Córdoba de MappA ha recolectado muestras en 11 sitios representativos de la diversidad de ambientes acuáticos de la región. Desde el dique San Roque hasta el río Tiu Mayu, se busca analizar la presencia de microplásticos en diferentes contextos.
Las muestras, recolectadas entre diciembre de 2023 y abril de 2024, se encuentran en fase de análisis. El Nodo Córdoba también está analizando muestras de otras provincias, contribuyendo al esfuerzo nacional de mapeo de la contaminación por microplásticos.
Resultados Esperados: Hacia una Base de Datos Pública
Se espera que para 2025, MappA haya construido una base de datos de acceso público con información sobre la abundancia, forma, tamaño, color y tipos de polímeros de los microplásticos encontrados.
Esta base de datos también incluirá información sobre variables antropogénicas, como el uso de la tierra y la densidad poblacional, así como variables ambientales como la temperatura y la precipitación.
Impacto y Soluciones: Un Llamado a la Acción
La información generada por MappA será crucial para comprender la magnitud del problema de los microplásticos en Argentina y para desarrollar políticas públicas que promuevan la gestión sostenible de los recursos hídricos.
La reducción del consumo de plástico, especialmente de un solo uso, es fundamental para combatir este problema. Acciones como evitar los envases de plástico, usar bolsas reutilizables y reciclar son esenciales.
Lidwina Bertrand, especialista en contaminación acuática e integrante del proyecto, destaca la importancia de la gestión adecuada de residuos sólidos urbanos y el tratamiento de aguas residuales para reducir la carga de microplásticos que llegan a los ecosistemas acuáticos. A su vez, la investigadora resalta el valor de un relevamiento que abarca a toda Argentina:
“Se trata de una oportunidad única: la diversidad de ambientes en Argentina, con sus climas y geografías tan diferentes, permite estudiar la contaminación por microplásticos en contextos ambientales muy distintos, así como identificar la influencia de variables antrópicas y climáticas sobre su distribución”.
El Futuro del Agua Dulce: Un Desafío Compartido
La contaminación por microplásticos es un problema complejo que requiere un enfoque integral. La investigación científica, la acción gubernamental y la responsabilidad individual son pilares fundamentales para proteger los ecosistemas de agua dulce, esenciales para la vida y el bienestar humano.
Fuente: UNCiencia.