Federer, actual número 3 del ránking ATP, había sido el campeón en Melbourne en las dos ediciones anteriores y buscaba un histórico séptimo título en el primer grande de la temporada, un récord al que sigue aspirando Novak Djokovic, también con seis títulos en Australia y que jugará el lunes su partido de octavos de final contra el ruso Daniil Medvedev.
El mítico tenista de Basilea, ganador de 20 torneos del Grand Slam, tampoco podrá llegar en Melbourne Park a su título número 100 en el circuito ATP, otra de las metas que tenía fijadas en esta edición.
Es la segunda vez seguida en un torneo de la máxima categoría en la que Federer se despide en los octavos de final, ya que perdió en esa ronda en el último Abierto de Estados Unidos, entonces contra el australiano John Millman.
Un momento decisivo en la derrota de este domingo se dio en el segundo set, cuando Federer dejó escapar cuatro bolas a favor para haberse puesto con 2 sets a 0 a favor, cuando dominaba 5-4 en la segunda manga. Su rival terminó conquistando ese set, lo que le sirvió como revulsivo para culminar la remontada.
Por su parte, Tsitsipas, uno de los estandartes de la nueva generación del tenis masculino a sus 20 años, alcanza por primera vez los cuartos de final de un Grand Slam. Hasta ahora los octavos del año pasado en Wimbledon eran su mejor actuación en un grande.
«Soy el hombre más feliz de la Tierra en este momento, es algo indescriptible», afirmó Tsitsipas al micrófono de John McEnroe. «Roger es una leyenda de nuestro deporte. Le respeto mucho. Es mi ídolo desde que tenía seis años, jugar contra él en la Rod Laver Arena es ya un sueño que se hace realidad, así que ganarle es algo indescriptible», afirmó.