Tomás Etcheverry se despidió ayer del Masters 1000 de París en segunda ronda. Pero se fue con la frente bien alta, aplaudido por el público y tras dar pelea durante dos horas y 44 minutos en un partidazo, intenso y muy disputado, ante Grigor Dimitrov.
El platense, 40° del mundo, se llevó en el tie break un primer set durísimo, pero no pudo con el búlgaro, octavo preclasificado y finalista del torneo el año pasado, que dio vuelta el marcador y firmó la victoria por 6-7 (9-11), 6-3 y 7-5.
El argentino de 25 años se quedó con las ganas de avanzar a los octavos de final en su segunda participación en el certamen y mejorar su actuación del año pasado (cayó ante Novak Djokovic en esta misma instancia).
Y el último Masters de la temporada quedó con un solo representante albiceleste en el cuadro, Francisco Cerúndolo, quien tras bajar a Andrey Rublev (6°) y sumar su 100ª victoria a nivel ATP, irá hoy -alrededor de las 9:00 de Argentina- por otra sorpresa frente a Stefanos Tsitsipas, décimo cabeza de serie.
El búlgaro -que reconoció que su rival “jugó increíble, sobre todo el primer set”- enfrentará ahora al francés Arthur Rinderknech, invitado de la organización y 60° del ranking, en su afán por seguir sumando puntos para sellar su clasificación a las ATP Finals de Turín.
El platense, en tanto, viajará a Belgrado, donde disputará su último torneo del año, antes de ponerse la camiseta albiceleste para las Finales de la Copa Davis.
El platense, en tanto, viajará a Belgrado, donde disputará su último torneo del año, antes de ponerse la camiseta albiceleste para las Finales de la Copa Davis.