La banca de inversión JP Morgan advirtió el viernes pasado, a través de un informe, que la renegociación de la deuda llevará más tiempo que el que sugirió el ministro de Hacienda de la Nación, Hernán Lacunza, y también el candidato presidencial del Frente de Todos, Alberto Fernández.
Tras una serie de encuentros con funcionarios de la Casa Rosada y miembros de la oposición, los técnicos del área de Emerging Markets Research aseguraron que lo más factible es que se llegue a un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y que luego se avance en el reperfilamiento “amigable” que anunció Lacunza. Hasta ese momento, el Gobierno seguirá pagando los intereses de la deuda pública.
“Creemos que una reestructuración de la deuda argentina tendrá lugar tras un eventual nuevo programa con el FMI una vez que haya asumido el nuevo Gobierno”, alertó JP Morgan. Además, sostuvo que “probablemente este proceso tome entre seis y 12 meses”. De todas maneras, confió en la capacidad de pago de Argentina durante ese lapso.
“En nuestro escenario base, bajo supuestos razonables, Argentina tendrá la liquidez suficiente en moneda extranjera para cumplir con los pagos por los siguientes seis a doce meses, lo que quiere decir que es poco probable que se suspendan los pagos por necesidades de liquidez antes de que concluya el proceso de reestructuración”, finalizó.