Tal como se esperaba tras los dos exitosos canjes de deuda en manos de acreedores privados conseguidos por el gobierno nacional, el riesgo país de la Argentina se desplomó ayer a la mitad de su valor. Según confirmó el banco estadounidense JP Morgan, que se encarga de calcularlo, el indicador pasó en una sola rueda de los 2.147 puntos básicos a los 1.083.
Con este descenso, la prima, que se utiliza para medir la probabilidad de incumplimiento de las obligaciones financieras que tiene una nación basándose en diferentes factores económicos, llegó a niveles registrados por última vez durante el año pasado. Antes de las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias celebradas en 2019, el riesgo país se ubicaba en 872 puntos, para luego saltar a 1.467 tras conocerse la derrota de la fuerza oficialista. Cabe destacar que el máximo nivel reciente se registró el 23 de marzo de este año, cuando el índice trepó a 4.362 debido a que las negociaciones entre el Gobierno y los tenedores de bonos emitidos bajo ley extranjera estaban lejos de un acuerdo.
Que el indicador continúe por encima de las 1.000 unidades tiene que ver con una alineación con la tasa de descuento del 10% con la que los inversores calcularon el valor de recupero de los bonos de la reestructuración que comenzaron a cotizar esta semana. Estos 1.083 puntos señalan que si el país tuviera la intención de volver a acceder al financiamiento internacional debería comprometerse a pagar un 10% de intereses al año para recibir dinero de los mercados. Este valor se estima comparando a la tasa de los títulos del Tesoro de la Argentina con la que ofrecen bonos similares de Estados Unidos, considerados como de riesgo cero.
Reuniones constructivas” con el Fondo
El vocero del Fondo Monetario Internacional (FMI), Gerry Rice, afirmó ayer que las conversaciones telemáticas entre el gobierno argentino y el organismo en las etapas iniciales” de la negociación se desarrollan en un clima muy constructivo”.
En este sentido, expresó el deseo de seguir colaborando en el próximo período para discutir nuevamente sus planes para fortalecer la estabilidad macroeconómica, impulsar el crecimiento y la creación de empleo”.
En el marco de una nueva conferencia de prensa, el funcionario del Fondo agregó que entre los anhelos del FMI se encuentran también reducir la pobreza y el desempleo y, por supuesto, ayudar a la Argentina a combatir la pandemia, que es un problema adicional grave, es un nuevo desafío que enfrenta el país”.