A pesar de la implementación y extensión de los programas de precios cuidados y precios máximos, el gobierno nacional no ha podido evitar que los productos alimenticios continúen aumentando sin freno. Es tal la suba acumulada en el último año en los valores de ese segmento que logró superar el aumento del índice de precios al consumidor (IPC).
Según datos brindados por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), la Canasta Básica Alimentaria (CBA) registró en el mes de septiembre último un aumento interanual, es decir, en comparación con el mismo mes del año pasado, de 39,6%. Esta cifra es considerablemente mayor (3%) a la suba que registró la inflación durante el mismo período, que llegó al 36,6%. Asimismo, en el acumulado de los primeros nueve meses del año, la CBA se incrementó en un 24,7%, contra el 22,3% del costo de vida.
Con este importante aumento, cabe destacar que solo durante septiembre creció 3,4% (la segunda suba más alta del año), la canasta alimentaria se ubicó en $ 19.430. Por lo que una familia conformada por dos adultos y dos menores requirió contar con esos ingresos para no caer bajo la línea de la indigencia (LI). Por su parte, el valor de ese indicador para una sola persona llegó a $ 6.288.
En el mismo informe, el organismo nacional informó que la Canasta Básica Total (CBT) aumentó nada menos que 3,8% durante el noveno mes del corriente año. Con esto, la CBT para una familia tipo escaló a los $ 47.216, por lo que los hogares que no llegaron a percibir ese monto cayeron por debajo de la línea de la pobreza (LP). En tanto, para una sola persona, la canasta total, que además de alimentos incluye vestimenta, transporte y salud, entre otros rubros, llegó a $ 15.280.
Además, este indicador se incrementó 35,7% en relación con septiembre de 2019 y acumuló una suba de 21,2% en lo que va de 2020.
Se aceleran las expectativas de inflación
Un nuevo sondeo del Centro de Investigación en Finanzas (CIF) de la Universidad Di Tella de Buenos Aires reveló una aceleración en las expectativas de inflación para el próximo año. Según el flamante estudio realizado por los economistas de esa institución académica, la mediana del costo de vida esperada para los próximos 12 meses subió de 40% a 45%.
Asimismo, el promedio de las estimaciones de la población sobre el futuro del índice de precios al consumidor (IPC) subieron 3,7% respecto de la medición de septiembre de 2020 y se ubican en 47%.
En el informe, el equipo liderado por el especialista Ernesto Schargrodsky señala que en la distribución regional, según la mediana, las expectativas de inflación se mantienen en Capital Federal, mientras que aumentan en el Gran Buenos Aires y el interior del país”.
En tanto, la inflación esperada, según el promedio, subió en todo el país: en Capital Federal marcó 48,6% (+2,2%), en el Gran Buenos Aires subió a 46,1% (+3,8%) y en el resto de Argentina llegó a 47,5% (+4%). En tanto, en la distribución por nivel de ingreso, según el trabajo del CIF, las expectativas de inflación aumentan para la población de ingresos altos, mientras que se mantienen para la población de ingresos bajos”.