Este registro implica una mejora en las pérdidas netas registradas en el 2020, que fue de US$ 126.400 millones, en tanto que las perspectivas apuntan al inicio de una recuperación de la industria en la última parte del año.
Según destacaron, los operadores latinoamericanos tienen la ventaja de que casi la mitad (un 48%) de sus RPK (ingreso por pasajero por kilómetro) se generan en los mercados nacionales.
De este modo, señalaron que se prevé que los ingresos derivados del crecimiento de los viajes nacionales reduzcan las pérdidas netas en más de dos tercios este año, hasta un 20,4% menos de los ingresos en 2021, contra la reducción del 80,1% registrada en 2020.