El gobernador electo Martín Llaryora deberá afrontar desde el inicio mismo de su gestión un déficit previsional que se ubicaría por encima de los 150.000 millones de pesos -en el mejor de los casos- y que prácticamente tendrá que cubrir con fondos propios luego de que el proyecto de Presupuesto nacional 2024 eliminó los artículos 92 y 93 que aseguraban la actualización de los giros de Anses por movilidad previsional.
Efectivamente, de acuerdo al texto del proyecto, la iniciativa que recién se comenzará a discutir tras las elecciones presidenciales del 22 de octubre, sólo incluye el artículo 49 que asegura un monto global para las cajas previsionales provinciales no transferidas, pero nada dice respecto a un eventual ajuste por movilidad hasta tanto Anses audite y acuerde el déficit efectivo de cada organismo provincial.
Esa cláusula figuraba en el Presupuesto 2023. Sin embargo, nunca se cumplió bajo el pretexto de que mientras no se reglamentaran, Anses continuaría con los pagos mensuales en línea con los del año anterior. Así, este año la Caja de Jubilaciones recibe de la Nación 1.072 millones de pesos mensuales, el mismo monto que en 2022, cuando de haberse cumplido el texto de los artículos 92 y 93, Anses debería haber girado un fondeo que aseguraba la cobertura plena del rojo anual que este año rondaría los 100.000 millones de pesos, reveló ayer el diario Comercio y Justicia.
La decisión de eludir el mandato de esos artículos por medio de una resolución de Anses, motivó una presentación de Córdoba ante la Corte Suprema de Justicia y la interposición de un amparo, medidas aún sin respuesta por parte del máximo tribunal.
En paralelo, el déficit de la Caja se incrementó notablemente este año luego de que el gobernador Juan Schiaretti resolviera a comienzos de año suspender la vigencia del diferimiento previsional para más de 70% de los pasivos, medida que ahora se amplió a más de 90% de los jubilados. En un contexto inflacionario, esa medida fue determinante para que se disparara el rojo.
Como Llaryora ya anticipó que en su gestión se mantendrá la suspensión o directamente se eliminará el diferimiento, nada hace suponer que el déficit de la Caja vaya a morigerarse en 2024. En ese marco, de mantenerse el proyecto de Presupuesto tal como fue enviado por el Ejecutivo al Congreso -al menos en ese punto-, el gobernador electo deberá lidiar con un quebranto previsional que tendrá que cubrir con recursos del Tesoro, en un año en el que la situación macroeconómica será cuanto menos incierta.
Escenarios posibles
El panorama en ciernes es el peor escenario entre las diferentes hipótesis en análisis. Una alternativa es que el proyecto de Presupuesto se modifique y que se reactiven los artículos eliminados que aseguraban el ajuste por movilidad previsional de los fondos que remite Anses a la Caja.
Otro posible es que la Corte Suprema falle a favor de Córdoba, tal como se estima. Sin embargo, no hay plazos aún para una definición del Máximo Tribunal.
Otra alternativa, por cierto ajustada a las normativas vigentes previas al proyecto, es que Anses audite las cuentas de la Caja con los datos que Córdoba ya envió hace tiempo y ajuste los montos a girar conforme los números actuales.
Finalmente, también está la posibilidad que el futuro gobierno nacional resuelva sostener la situación actual y no enviar mayores fondos a las cajas no transferidas. Esa chance aparece muy probable en el caso de que el futuro presidente sea Javier Milei.
Qué dice el Presupuesto
El proyecto girado al Congreso, en el Capítulo IX “De la relación con provincias”, señala en su artículo 49: “Establécese como crédito presupuestario para transferencias a cajas previsionales provinciales de la Anses la suma de $ 204.886.400.000 para financiar gastos corrientes dentro del Programa Transferencias y Contribuciones a la Seguridad Social y Organismos Descentralizados, Grupo 07, Transferencias a Cajas Previsionales Provinciales.
La Anses transferirá mensualmente a las provincias que no transfirieron sus regímenes previsionales al Estado nacional, en concepto de anticipo a cuenta, del resultado definitivo del sistema previsional provincial, el equivalente a una doceava parte del último monto total del déficit –provisorio o definitivo– determinado de acuerdo con el Decreto N° 730 del 8 de agosto de 2018 y sus normas complementarias y/o modificatorias. La Anses será la encargada de determinar los montos totales a transferir a cada provincia”.
El Presupuesto 2023, en su artículo 50, tenía el mismo texto sólo que el monto a transferir era de $ 100.922.664.874. De esta manera, el monto extra a repartir en 2024 será el 103% mayor al del año en curso. Traducido en números, la Caja pasaría de recibir 1.072 millones de pesos mensuales a poco más de 2.200 millones de pesos.
De todas formas, las fuentes consultadas tampoco precisaron si la duplicación de los montos globales a repartir, implicará de manera directa que la Caja reciba el doble que los fondos actuales.