Falleció un símbolo de la cultura brasileña, la cantante María da Graça Costa murió ayer miércoles a sus 77 años de edad. Fue su representante quién dio la noticia a pesar de que las causas aún no han sido esclarecidas.
Gal Costa había nacido en 1945 en Salvador de Bahía y se convirtió en una de los íconos más importantes de la Música Popular Brasileña, uno de los géneros musicales más destacados del país junto a la Bossa Nova. La artista se dedicó seis décadas a la producción musical de manera activa hasta hace tan solo unos pocos días que había anunciado la suspensión de sus próximos conciertos debido a que tenía que realizarse una cirugía en la nariz. Sin embargo, pronto volvería al escenario con el show programado para el 17 de diciembre en São Paulo.
La artista se subió al escenario de joven, en 1964 en la inauguración del Teatro Vila Velha en Salvador de Bahía, junto a Caetano Veloso, Gilberto Gil, Maria Bethânia y Tom Zé con quienes luego entabló amistad y realizaron numerosos proyectos juntos. Ese mismo año participó en «la Bossa Nova Velha, Velha Bossa Nova», en el mismo lugar y con el mismo elenco. En 1965, a sus 20 años de edad, se subió al escenario junto a João Gilberto. Al año siguiente, entró por primera vez a un estudio para grabar un disco con Veloso, titulado “Domingo”. Muy pronto, Gal sería una de las invitadas especiales del disco clave del tropicalismo, “Tropicália: Ou Panis et Circenses” (1968), que reunió a Caetano, Gil, Nara Leao y Os Mutantes. Allí, la artista puso su voz en varias canciones, pero tuvo protagonismo en dos que con el correr de los años se transformarían en clásicos de su repertorio: “Baby” y “Mamãe, coragem”. Ese mismo año se volvió popular gracias a su notable aparición en un programa televisivo de la en donde cantó “Divino Maravilhoso”, un tema de Gil y Caetano que sería incluida en Gal Costa, uno de los dos discos editados por la cantante en 1969. Su trayectoria fue reconocida a nivel mundial y en 2011, Costa recibió el Premio a la Excelencia Musical de la Academia Latina de la Grabación, organización que otorga los Latin Grammy.
La artista fue despedida por sus fanáticos en las redes sociales e incluso el presidente de Brasíl, Lula da Silva, realizó un posteo en su cuenta de Twitter con una foto de ambos abrazados y escribió: “Gal Costa fue de las cantantes más grandes del mundo, de nuestras principales artistas que llevó el nombre y las canciones de Brasil a todo el planeta. Su talento, su técnica y su osadía enriquecieron y renovaron nuestra cultura, y marcaron la vida de millones de brasileños”. A su vez, sostuvo que hoy el país pierde “una de sus grandes voces” y expresó sus condolencias para con sus familiares, amigos y admiradores.