La segunda jornada del 55º Festival Internacional de Peñas de Villa María, tuvo anoche como estrellas a los jóvenes Tiago PZK, Nicki Nicole, Trueno, Dillom, referentes que llevaron su música urbana al entusiasta púbico que se convocó a un completo Anfiteatro Municipal.
El encargado de culminar el segundo día de presentaciones musicales fue Tiago PZK, que subió al escenario cerca de las 2 de la madrugada para capitalizar la energía de su antecesor Trueno, pero con una aproximación más tranquila y menos movida.
El set del freestyler bonaerense, que se extendió durante una hora, abarcó su repertorio de R&B, rap y reggaetón y sorprendió con un destacado momento folclórico.
«Se habló mucho de que este año había mucha música urbana en el festival, que faltaba un poquito de la música argentina de nuestras raíces; estamos en un festival de folclore, así que le quiero rendir un homenaje a la música de nuestra tierra tan amada», dijo Tiago PZK para introducir sucesivas versiones de «La ley y la trampa» y «Amor salvaje», del Chaqueño Palavecino, que enloquecieron a la concurrencia.
Luego de culminar en 2022 su gira «Portales Tour», que lo llevó por 11 países de tres continentes en casi 40 conciertos, el joven de 21 años eligió para el inicio de su presentación la canción «Casa de chapa», single incluido en su único álbum editado el año pasado.
El show siguió con hits como «Entre nosotros», grabado en colaboración con LIT Killah, Maria Becerra y Nicki Nicole; «Házmelo» y «Bemaste», canción que es interpretada por primera vez en vivo luego de ser lanzada el mes pasado como single, una balada íntima que el artista contó que produjo «desde el fondo de su corazón» y la consideró como «la primera obra de arte» de su carrera, «conceptual y audiovisualmente».
Llegando al final, el rapero recibió a Trueno en su escenario para interpretar conjuntamente «Salimo’ de noche», y cerrar con «Sex & Love», que editó con el jamaiquino Rvssian; «Traductor», grabada con el puertorriqueño Myke Towers; «Hablando de love», y la exitosa colaboración con Bizarrap en la «Bzrp Music Sessions, Vol. 48».
De manera previa, Trueno, el también freestyler surgido de El Quinto Escalón, salió a escena pasada la medianoche vestido con un conjunto deportivo urbano blanco con zapatillas y gorra celeste para inaugurar su presentación con «Buenos Aires en llamas», apoyado en unas esmeradas visuales rojas en la pantalla gigantes detrás del escenario, que reproducían un cielo lluvioso y tormentoso, transformado en fuego y llamaradas.
En su primera fecha del año, el artista porteño de 20 años aportó una singular energía al festival con su aproximación al hip hop por momentos con sonidos hardcore y rockeros, con participación vocal de su padre Pedro Palacios y Camilo 420 en partes del show.
En la primera parte de su participación, Trueno repasó canciones como «Lo tengo», en la que colaboró con el rapero estadounidense J.I.D; una versión con guitarra acústica del tema «Jungle», que hizo junto a Bizarrap y el puertorriqueño Randy.
«Este es un show para la familia: lo más importante es cuidarnos entre todos», destacó el rapero a poco de iniciada su energética performance acompañado por su banda compuesta por intérpretes de percusión, batería, teclados, bajo y guitarra.
El momento más celebrado de la noche se dio cuando realizó una improvisación de freestyle con base de trap a la que se sumó sorpresivamente Tiago PZK ante la aclamación del público joven que colmó el Anfiteatro Municipal por segundo día consecutivo.
Trueno abarcó varias canciones de su último disco, «Bien o mal» (2022), que pasa por sonidos de reggaetón, dancehall y rap, con temas más autóctonos como «Tierra zanta», grabada con Victor Heredia, en la que el público tuvo una destacada participación acompañando con palmas.
Para el cierre, tras casi una hora de show, el freestyler interpretó «Argentina», track editado con Nathy Peluso en «Bien o mal», «Fuck el Police», su tema homenaje a la banda pionera NWA en el que denuncia casos de abuso policial, y su hit «Dance Crip».
Más temprano, otra de las atracciones principales del evento fue la presentación de Nicki Nicole, que salió al escenario pasadas las 10 de la noche ante la aclamación de su público, que se paró en los asientos para observar mejor a la joven y mantuvo esa posición para el resto del espectáculo.
La rosarina de 22 años brindó un concierto de alrededor de 80 minutos, su segundo show en el Festival de Villa María, en el que se movió por sus habituales géneros pop, trap, hip hop y R&B, a través de temas como «Frío», estrenado en noviembre; «Colocao», «Mala vida», «Baby» y la colaboración con Bizarrap en la sesión número 13 del exitoso productor.
Acompañada por cuatro bailarines con pasamontañas y vestidos de negro y un conjunto formado por tecladista, guitarrista, bajista, baterista, Nicki Nicole eligió una indumentaria con pantalón y remera blancas y borceguíes negros.
La estrella pop centralizó la energía teen de las chicas presentes, que con agudos gritos y pancartas expresaron su cariño por la cantante urbana al entusiasmarse con canciones como «Ella no es tuya», «Toa la vida», «Entre nosotros», «Años luz» y, sobre todo, «Plegarias», emotiva canción para la que Nicki Nicole pidió al público disponga de sus linternas.
La performance de la rosarina tuvo también un momento en el que la artista bailó y cantó con algunos fans el tema que cantó con el grupo mexicano Los Ángeles Azules «Otra noche».
Tras la fase final de su show, en la que sonó «Formentera», «Intoxicao», «Marisola», «Mamichula», «Ya me fui» y «Wapo Traketero», Nicki Nicole se sacó algunas fotos con sus admiradores mientras sonaba una mundialista versión con cánticos del Himno Nacional y se exhibía en pantallas imágenes de los penales del partido entre Argentina y Holanda de la última Copa del Mundo.
Por otra parte, Dillom estuvo a cargo de iniciar la jornada festivalera pasadas las 9 de la noche e hizo provecho de su background rockero, con elaboradas animaciones en pantalla gigante y un buen despliegue visual que hizo que los espectadores lo recibieran con aclamación.
En el arranque, el rapero interpretó los tracks «Bicicleta», «Opa» y «220», en el que la concurrencia acompañó el clima más intimista con linternas con sus celulares, que forman parte de su disco «Post Mortem».
La etapa final del show de Dillom, que se extendió aproximadamente durante una hora, culminó con el tema «Reality» y el joven de 22 años acercándose al público para saludar y sacarse fotos con sus fans.