Michael Bublé es uno de los cantantes canadienses más reconocidos, con cuatro premios Grammy y más de 30 millones de discos vendidos. Pese al éxito que alcanzó, el artista antepuso su familia a su carrera musical, luego de que su hijo Noah, de entonces tres años, le diagnosticaran cáncer. Su decisión provocó que los productores en 2016 le advirtieran que su trabajo corría un gran riesgo, incluso, que lo perdería todo.
Los medios Daily Mail y The Sun develaron cómo Buble vivió la situación luego de que su equipo le dijera que ese paso al costado en la industria de la música podría haber puesto en peligro su carrera, debido a que la estrella no sabía con exactitud si regresaría alguna vez a los escenarios.
«Cuando me fui, tal y como estaban las cosas con mi familia y mi hijo, nunca supe si iba a volver. […] Tuve diferentes promotores que me dijeron: Escuchá, Mike, esto puede terminar para ti. La gente olvida rápido. Te alejás, se olvidan y pasan al siguiente cantante”, contó el canadiense.
La buena noticia es que Noah mejoró y recibió el visto bueno de los médicos. Fue así, que en 2017 Michael Bublé volvió a los escenarios con un concierto en Dublín, Irlanda. Un espectáculo en el que el cantante lloró durante dos horas: Fue muy emotivo para mí, estaba muy feliz porque Noah estaba bien, gracias a Dios».
Actualmente, Bublé está por cerrar su gira 2019, un tour que lo llevó a recorrer Europa, donde captó la atención de todos con sus melodías.