“Con esta manito del amor y ahora que me siento un poco mejor, te cuento que te dejé tres posteos para que te entretengas y sepas qué onda el nacimiento de Azul”, escribió en sus redes sociales Dalma Maradona junto con una foto de la mano de su pequeña que acaba de cumplir una semana. Además de dar detalles sobre cómo fue la cesárea y su lactancia, en ellos contó que le diagnosticaron anemia y que por eso se demoró su alta médica y tuvo que recibir transfusiones.
“Con ojeras y esta budita que asoma por ahí les cuento que hoy cumple una semana de vida mi segunda hija y una semana de vida para esta familia que crece”, comenzó escribiendo. Y agregó: “Por una situación ajena a mí, me vi en la necesidad de contar un hecho que me sucedió justo antes que me dieran el alta. Por suerte ya me estoy ocupando y solo lo cuento por si a alguien le sirve mi experiencia”.
Fue entonces que explicó que le diagnosticaron “una anemia muy severa” por lo que le tuvieron que hacer una transfusión de sangre. “Yo no quería saber nada de quedarme porque en casa me esperaba Roma, pero obviamente no fue opcional, porque después me di cuenta que no me podía levantar por mis medios de una silla. Así que aprovecho para agradecer a todos los médicos. Gracias a las enfermeras, a las que te traen la comida, a las que te preparan la habitación y a todo el personal que trabaja con tanto amor”, escribió.
“Y mención especial para las puericultoras que se acordaban de mí hacía tres años y sabían que con Roma no me había ido bien y que ahora estaban tan contentas como yo de que nos estaba funcionando la lactancia. Anita sos una persona hermosa que le dedica todo a su profesión , ella es pueri con todo su cuerpo y yo celebro nuestro encuentro. Te lo dije personalmente y te lo repito, sos todo. Sigo recuperándome y sigo aprendiendo, que es lo importante”, cerró el último de sus posteos.
Anteriormente, había subido otro con una foto de ella en el quirófano y su marido, Andrés Caldarelli sosteniéndola: “Todos los partos son diferentes pero yo decidí repetir equipo porque son los mejores. Desde las ecografías con todas mis preguntas incluidas con el genial y paciente doctor Marcelo Domínguez hasta mi segunda cesárea. Gracias a mi obstetra Aníbal dal Verme por el acompañamiento y por ser tan amoroso, Silvi la mejor partera del universo aunque yo nunca haya tenido una contracción, Gabi Arias por ser la mejor instrumentadora y decirme en el medio de la cesárea ‘qué linda que sos por dentro’, al anestesiólogo que se banco que le avisara que iba a llorar porque soy actriz y por ningún otro motivo”.
“Gracias por traer al mundo a Azul con ese amor que se vibraba en el quirófano. No se volverá a repetir porque la fábrica está cerrada pero sin duda los volvería a elegir. Capítulo aparte para la mano de Marido Potro que estuvo ahí como siempre y a Claudia Villafañe que sin vos no podría nada, a mi sis y a mi ángel de la guarda”, cerró.