El conflicto familiar de Piñón Fijo parece no tener fin. Desde que el último viernes el popular payaso publicó en sus historias de Instagram un particular mensaje dando a entender que sus hijos le prohibían el contacto con sus nietos, el escándalo en su entorno se hizo público y ya no hubo vuelta atrás, ya que fueron los propios protagonistas los que decidieron salir a hablar. Por caso, este lunes lo hizo su hija Sol, que acusó a su padre de maltrato, y horas más tarde hizo lo suyo Jeremías, el otro herdero del animador infantil, quien negó rotundamente que le hayan prohibido a Fabián Alberto Gómez las visitas a sus nietos.
“Mi gran pecado y si hubiera sabido las consecuencias no lo hubiera hecho, fue subir a las redes un posteo diciendo que extrañaba a mi nieta (…) Hoy en día es fácil acusar de maltrato y de violencia. Omitir decir claramente la verdad, muchas veces te deja mal parado a vos..”, expresó Piñón ante la prensa, luego de conocer los dichos de sus hijos.
Lo cierto es que este martes Jeremías volvió a tomar la palabra, pero esta vez a través de un mensaje que le envío vía Whatsapp a Pablo Layus, y que el periodista reprodujo en Intrusos (América): “Vos sabés perfectamente cómo me estoy rompiendo el lomo trabajando incansablemente para tratar de formar mi propio camino sin pedirle nada a nadie. Recuerdo que me has felicitado por eso. Me sorprende que hablen de ´mucho dinero´”, comenzó expresando el joven.
Y continuó: “Mi hermana y yo lo único que hubiésemos querido en estos tiempos de tanta tormenta es que ese ‘yo amo a mis hijos’ que dijo en conferencia de prensa, lo haga puertas adentro, levantando el teléfono, tocando una puerta. Te juro que con algo tan simple como eso, se solucionaban todas las diferencias, porque el amor hacia él siempre estuvo más allá de todo. Por eso también lo supimos perdonar y cuidar”. En tanto, cerró: “No hay ningún tema de dinero. Tenemos la dignidad y las ganas suficientes para ganarnos la vida por nuestros medios. Como lo hicimos siempre… aunque muchas veces no se haya valorado”.
Según había contado Layus el viernes pasado, todo había comenzado cuando el payaso se había separado de su mujer y que, a partir de ese momento, se había interrumpido la relación con sus hijos y, por consiguiente, con sus nietos Luna y León. Entonces, Sol explicó que hace ocho meses que no ve a su padre y aseguró: “Es porque está desaparecido de nuestras vidas después del último de tantos maltratos (en mi semana 32 de embarazo). Y fue el último porque me animé a poner límite a las humillaciones crónicas después de 35 años”. Y remarcó que su idea era criar a sus hijos “en entornos sanos y alejados de violencia expresada en todas sus versiones, donde el respeto, la lealtad y la comprensión sean los pilares”.