Personal de la Policía halló una suma millonaria en la vivienda del pintor Alberto Prato, quien fue asesinado el fin de semana por un joven de 18 años en la localidad de General Cabrera, al sur provincial. El fiscal de Tercer Turno de Río Cuarto, Fernando Moine, indicó ayer que los investigadores encontraron 130.000 dólares y 600.000 pesos que estaban escondidos en una pieza del inmueble. No obstante, el funcionario judicial descartó que el asesino haya tenido conocimiento de la existencia del dinero.
“En principio, no se ha acreditado que el victimario haya tenido conocimiento de la existencia del dinero. Todo indica que fue un hecho de inseguridad y violencia” sin que el ladrón tuviera datos precisos del dinero, expresó Moine, quien imputó al acusado, identificado como Jorge Alberto Córdoba, de homicidio en ocasión de robo. “El informe preliminar de autopsia determinó que el asesino golpeó a Prato en el rostro con una espátula, generándole heridas que emanaron abundante sangre”, señaló el fiscal, quien relató que la víctima cayó al suelo y, en principio, se habría broncoaspirado.
De acuerdo a fuentes allegadas a la causa, Córdoba mostraría lesiones en una de las manos, lo que demostraría que rompió un vidrio de una puerta para ingresar a la vivienda. El cuerpo de Prato, que era un conocido vecino de General Cabrera que se desempeñaba como pintor de obra, fue encontrado en el patio de la vivienda por su hijo.
En tanto, en Río Cuarto, un hombre de 30 años, identificado como Matías Romero, murió en plena vía pública al recibir dos balazos durante una pelea.
Por el crimen fue detenido un joven de 22 años, quien habría sido el autor de los disparos que hirieron en el tórax a la víctima. Según fuentes policiales, el detenido es vecino y conocido de la víctima, por lo que intenta investigar los pormenores que desataron la riña.
El ataque alrededor de las 19:30 del domingo en el barrio Río Limay y de acuerdo a lo señalado por testigos, fueron los propios vecinos lo que dieron aviso a la Policía luego de escuchar los disparos en la vía pública. Inmediatamente, los agentes de seguridad convocaron a los servicios de salud, que determinaron el traslado urgente de Romero al Hospital San Antonio de Padua, donde falleció en las primeras horas de la noche.
El caso quedó en manos del fiscal Fernando Moine, quien imputó al detenido de homicidio agravado.