En el primer día de implementación de la reducción de los asientos disponibles en el transporte urbano de pasajeros por parte de la Municipalidad de Córdoba, los usuarios manifestaron su disconformidad por la falta de frecuencias. La medida dictada por la Secretaría de Movilidad Urbana municipal en busca de evitar el acercamiento físico en el marco de la pandemia del coronavirus establece que los colectivos circulen con hasta 20 butacas ocupadas.
Ante esta disposición, los pasajeros de distintos barrios de la ciudad se quejaron de que las frecuencias no aumentaron y que, de esta forma, deben esperar mucho tiempo hasta conseguir un ómnibus en el que puedan subir. Los reclamos se registraron, principalmente, en las paradas más alejadas de las puntas de línea y más cercanas al centro. El primero (colectivo) no lo pude tomar y el segundo tampoco. Recién el tercero paró. Pero la Policía hizo bajar a todas las personas que iban sentadas”, detalló uno de los usuarios afectados. Además, las quejas se hicieron visibles en las redes sociales. Todo muy bonito y prolijito pero nadie dice si van a aumentar la cantidad de colectivos para que la frecuencia sea menor a los 50 minutos de hoy. Sino con esa capacidad, en hora pico, tendremos que esperar dos horas un colectivo que te lleve”, advirtió un vecino a través de Twitter.
En esa plataforma también se viralizó un reclamo de que la línea 30 de la empresa Ersa viajaban más personas de las permitidas. Viene toda la gente sentada, tanto los cuatro asientos del fondo como los de a dos”, narró un usuario. Tomé el ómnibus con gente parada, subió un policía y los bajó. El problema es que hay mucha más gente y la frecuencia de domingo (con la mitad de lugares) no alcanza”, detalló otra pasajera.
Otra usuaria de la red social y del transporte urbano hizo su descargo por la misma plataforma: «5 líneas puedo tomar: 21,23,27,28,81. Esperé al sol en la Colón 40 minutos, a las 14:30. Cuando llegó (¡milagro!) UNO de los CINCO, fuimos sentados en todos los asientos. Todos sentados, uno al lado del otro», describió la vecina de la zona sur de la ciudad.
En este sentido, Marcelo Rodio, titular de la Tamse, reconoció la existencia de problemas en las frecuencias de los trolebuses, pero aseguró que se está trabajando” en darle una solución. Agregamos tres refuerzos a la línea B porque teníamos demoras en el servicio, que rápidamente pudimos encaminar. Sabemos que es una situación muy dinámica que iremos solucionando”, concluyó.