La tercera edición de la semana de no dulzura”, una campaña de bien público impulsada por nutricionistas, cocineros y otras instituciones, comienza hoy hasta el próximo viernes 31 de julio con el objetivo de generar conciencia sobre la importancia de moderar el consumo de azúcar y promover la educación alimentaria para prevenir enfermedades.
El lema de este año es ¡Azúcar oculto, al frente!”, en apoyo a la implementación de la Ley de Etiquetado Frontal de Alimentos que busca proteger y garantizar el derecho a la salud y a la información de los consumidores.
Según estudios recientes, en la Argentina se consumen 114 gramos de azúcar diarios por habitante, el triple de lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) que va entre los 25 y 50 gramos.
Este exceso contribuye al crecimiento de la obesidad y las enfermedades crónicas no transmisibles (como la diabetes, el cáncer, las enfermedades cardiovasculares y enfermedades cerebrovasculares), que son la primera causa de muerte en el país, advierten los promotores de la Semana de la no dulzura. Además, señalan que más de la mitad de los productos que hoy están en góndolas contienen azúcar, la cual está presente en productos impensados como por ejemplo pastas de dientes, pan de molde, salsas, aderezos, pizzas congeladas, entre otros”.
De esta manera, en esta tercera edición se apoya la iniciativa del sistema gráfico de advertencias (octógonos negros) que busca visibilizar en los envases aquellos ingredientes críticos que en exceso resultan nocivos para la salud (como azúcar, grasas, sal o calorías) y le permiten al consumidor tomar decisiones de compra mejor informadas.
Al respecto, la licenciada en Nutrición Antonella Robledo Irigoyen (MP 2151), una de las impulsoras de la Semana De la No Dulzura”, sostuvo que la Ley de Etiquetado Frontal que obtuvo dictamen es importante para moderar el consumo de azúcar y combatir la pandemia de la obesidad y agregó que la ley está basada en los mejores estándares de salud pública y en evidencia científica libre de conflicto de interés”.
Esto es vital para ponerle un límite a la industria, que tiende a aprovechar los vacíos legales para promover alimentos no saludables, sin declarar si contienen azúcar, haciendo creer que un alimento es saludable cuando no lo es”, sentenció.
Asimismo, el fundador de Zafranito, una de las empresas que forma parte de la campaña, Nito Anello, explicó: Proteger a las infancias es uno de los objetivos de la Semana de la No Dulzura. En esta tercera edición se incentiva la elaboración de un proyecto sobre educación alimentaria en los colegios, en el año que se promulgó Ley de Educación Ambiental, que tanto festejamos”. La Semana de la No Dulzura” tiene un alto componente educativo, propone reeducar el paladar y repensar las costumbres.