La bajante del río San Antonio ha complicado a Villa Carlos Paz y a otras localidades del sur de Punilla. También el lago San Roque bajó mucho su caudal. En la región de Alta Gracia ocurren dificultades similares. La crisis hídrica que provoca la extensa sequía generó que el municipio de Carlos Paz declarara la alerta roja para el servicio de provisión de agua potable en la ciudad.
La situación no afecta solo a Carlos Paz si no a todos los municipios y comunas del sur de Punilla que extraen el recurso de la misma fuente: el río San Antonio. Desde hace dos años, es el municipio de la villa serrana el que se hizo cargo de la planta de captación y de potabilización ubicada en la localidad de Cuesta Blanca tras rescindirle la concesión del servicio a a la Cooperativa Integral (Coopi).
Desde esa fecha se encarga también de distribuirle el recurso a los demás municipios de la zona sur de Punilla. El sábado, después de varios días en que distintos barrios de la ciudad de Carlos Paz plantearon que no estaban recibiendo agua, el municipio decretó la alerta roja.
La situación se agravó en las últimas horas con sectores en los que desde hace cuatro días no tienen el acceso al recurso. El lunes pasado, vecinos de Costa Azul Norte se quejaron por la situación a través de un comunicado: “Abren el chorro un par de horas, pero a muchos sectores del barrio con la baja presión que mandan, no les llega ni a llenar el tanque”, señalaron.
Según la normativa vigente, la alerta roja implica la declaración de la Emergencia Hídrica. Además, se prohíbe la utilización del agua para cualquier cosa que no sea consumo humano. Para que esto se cumpla, se prevé la sanción mediante multas y cortes del suministro por 48 horas y en caso de reincidencia por 72 horas. No se trata sólo de un año con lluvias por debajo de lo habitual, sino que se acumulan más de tres años en esa condición.
Los arroyos, ríos y lagos serranos son una prueba de esa situación, con niveles muy bajos y hasta cursos de agua que se han secado. Una situación también de alarma atraviesa la región más poblada del valle de Paravachasca, con eje en Alta Gracia y en comunas vecinas, donde la escasez de agua en als fuentes de captación también viene generando dificultades y restricciones en los últimos días.