Este viernes 8 se ofrecerán testeos con pruebas rápidas para la detección de hepatitis C, VIH y sífilis en el Paseo del Buen Pastor, de 14:30 a 18:30. En este sentido, destacaron que el testeo es voluntario, confidencial y gratuito.
A su vez, durante la jornada se realizará una reunión en la que participarán el Programa Nacional de Hepatitis-Ministerio de Salud de la Nación, el Programa de VIH/sida, ITS y Hepatitis Virales de la provincia y la Fundación HCV Sin fronteras, de Buenos Aires. El objetivo del encuentro es planificar acciones conjuntas entre Estado y asociaciones de la sociedad civil con el fin de caminar “Hacia la eliminación de las hepatitis virales”.
En este marco, Diosnel Bouchet, a cargo del Programa de VIH/sida, ITS y Hepatitis Virales de la Provincia, resaltó: “La articulación entre Estado y organizaciones de la sociedad civil es fundamental para pensar respuestas integrales a las hepatitis”.
“Sensibilizar e informar -continuó- a la comunidad sobre esta problemática de salud, expandir la oferta de diagnóstico, instalar en la comunidad la necesidad de vacunación para hepatitis B, el tratamiento, control y acompañamiento a las personas con Hepatitis B o C aparecen como grandes desafíos para los cuales sumar actores es fundamental”.
¿Qué es la hepatitis?
La hepatitis es la inflamación del hígado, órgano vital que procesa los nutrientes, cumple una función desintoxicante y sintetiza proteínas. Cuando el hígado está inflamado o dañado, su funcionamiento puede verse afectado.
Desde el Programa Provincial explican que, en general, la hepatitis es provocada por un virus y que las hepatitis virales son causadas más frecuentemente por los virus de hepatitis A, hepatitis B, hepatitis C y hepatitis E.
La hepatitis A y E se transmite por el contacto con agua, alimentos u objetos contaminados con materia fecal. En tanto las hepatitis B y C se transmiten por el contacto con sangre, por vía sexual o al compartir elementos cortopunzantes, como agujas y jeringas. También puede haber transmisión de la mamá infectada al bebé durante el embarazo y/o parto.
Las hepatitis B y C pueden evolucionar en formas crónicas y provocar enfermedades en el hígado como la cirrosis, insuficiencia hepática o cáncer de hígado.
Prevención
Para prevenir la hepatitis A se deben implementar medidas higiénicas como lavarse las manos después de ir al baño, cambiar los pañales y antes de preparar las comidas.
Además, se indica cocinar bien los alimentos y consumir agua hervida o purificada. También son importantes las condiciones ambientales como una correcta eliminación de excretas.
Para prevenir las hepatitis B y C, aconsejan el uso adecuado y continúo del preservativo en todas las prácticas sexuales y no compartir agujas o elementos cortopunzantes. Además, debe exigirse el uso de materiales descartables o esterilizados al hacerse tatuajes, piercings o implantes. A todas las personas embarazadas y su pareja se les debe realizar los test para detectar hepatitis y otras infecciones de transmisión sexual – ITS -, para evitar que el virus llegue al bebé.
La hepatitis A y la hepatitis B pueden prevenirse a través de sus respectivas vacunas, incluidas en el calendario Nacional de vacunación. La vacuna de la hepatitis A se aplica, en una única dosis, a los 12 meses de vida o a niños que nacieron a partir de 2005 (en el caso de no haberla recibido al año).
La vacuna de la Hepatitis B se aplica una dosis al recién nacido dentro de las 12 horas de vida y otras dosis a los 2, 4 y 6 meses de vida. También se incorporó al Calendario para todas las personas adultas.