El juez Marcelo Ramiro Durán Lobato, titular del Juzgado Civil, Comercial y de Familia de 2° Nominación de Villa Dolores, se hizo presente en el domicilio de una mujer con capacidad restringida para explicarle en qué estado se encuentra su causa judicial y qué medidas adoptó para que pueda cobrar dos beneficios previsionales que habían sido suspendidos por la autoridad administrativa.
La decisión de acudir personalmente al domicilio de la mujer -a 20 kilómetros de la sede judicial- estuvo motivada en las discrepancias familiares que existían en torno a la curatela de la mujer y en virtud de las reiteradas inasistencias de los curadores a las audiencias fijadas con anterioridad.
Además del magistrado, participaron de la audiencia la asesora Cecilia Maria Heredia, en su carácter de representante complementaria de la mujer; los hermanos de la causante, con sus respectivos patrocinantes; el juez de Paz local; e integrantes del Equipo Técnico Multidisciplinario de la Sexta Circunscripción Judicial.
Tras tomar contacto directo con la mujer y su entorno, en un ámbito de cordialidad, el juez Durán Lobato decidió que sea el hermano conviviente quien perciba los beneficios previsionales mensuales destinados a cubrir las necesidades vitales de la causante.
El magistrado fundó la decisión de tomar la audiencia en el domicilio de la mujer en lo dispuesto por las Reglas de Brasilia respecto a las medidas conducentes y necesarias para garantizar la tutela judicial efectiva de la causante, como así también en los artículos 35 y consecutivos del Código Civil y Comercial; en los artículos 28 y 29 de la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.
El juez Durán Lobato también consideró que, en este caso, era su labor acercar la justicia a las personas con una perspectiva interdisciplinaria que permita una mirada integral de las realidades de los sectores más excluidos.