Esto incluye a los alimentos, lo que quiere decir que no debemos dejar el plato de comida disponible a todas horas; lo recomendable es que al igual que nosotros, tenga un desayuno, comida y cena.
En el caso de esta última no debe ser muy tarde, pues si el perro pasa más de 12 horas sin comer puede padecer problemas estomacales como por ejemplo náuseas. También debemos recordar que el perro tendrá energía, por lo que querrá salir por muy noche que pueda ser.
Lo más recomendable es que el perro cene al menos tres horas antes de la hora de dormir en el hogar, pues esto dará tiempo para quemar toda la energía e incluso para salir a pasear y hacer sus necesidades.
La humedad, un factor importante que debes considerar en la dieta de tu perro
En la alimentación de nuestros perros la hidratación juega un papel muy importante, y esta la pueden obtener no solo a través del agua, sino de la humedad que tenga su comida, por lo que es necesario asegurarnos de que lo que consuma cumpla con este aspecto.
¿Por qué es importante? La falta de humedad en el alimento lo vuelve menos apetitoso para tu mascota, así como más compleja de digerir y por lo tanto, dificulta la absorción de nutrientes esenciales que sirven para asimilar correctamente estos componentes.
Si bien los productos industrializados húmedos o semisecos son una buena opción, al tener 30% de humedad, cada vez más los dueños de perros prefieren darle a sus mascotas una alimentación casera, que incluya principalmente carne cruda.
A esta dieta se le denomina BARF, y es muy útil para prevenir problemas dentales y otros padecimientos gastrointestinales, sin embargo, antes de cambiar su comida te recomendamos consultarlo con un veterinario.