Al igual que los humanos, parte de la salud de los perros implica su pelaje, que es una capa importante que los protege del exterior y debe ser cuidado no solo por estética.
Un pelaje suave y bien cuidado significa una buena salud en la mascota y mantenerlos aseados y con un buen aspecto es algo que muchas veces se complica pero que es más fácil de lo que pensamos.
Lo indispensable para cuidar el pelo de un perro desde casa es bañarlo siempre que lo notemos sucio y cepillarle el pelo de manera regular para evitar nudos. Por lo general hay épocas, como la primavera o el otoño, en que los perros suelen perder más cantidad de pelo de lo normal, en estos momentos, es importante bañarlo más seguido. De esta forma también se evitará que deje los pelos en el piso y ensucie la casa.
Como dijimos, lo principal en el cuidado del pelaje de los perros son los baños y su higiene, es importante que esto se haga acorde al tipo de pelo y piel de cada mascota. Existen muchos tipos de champús y lo conveniente es elegirlo en base a lo que nos recomiende el veterinario. En cuanto a la frecuencia de los baños, lo recomendable que se hagan entre un periodo aproximado de tres semanas a dos meses dependiendo del pelaje que tenga.
Los cepillados deben realizarse de manera regular, con cepillos adecuados, especialmente en las estaciones donde más suelen perder pelo. Para que este momento no se vuelva fastidioso para la mascota se debe realizar con el pelo seco.
Por otro lado, mantener el higiene en zonas más delicadas como los ojos, el hocico, la cola y las patas también es indispensable. Tanto las patas como la cola son zonas expuestas a bacterias y suciedad por lo que su pelo debe limpiarse regularmente. El hocico suele ensuciarse con comida o en los paseos y se puede limpiar con una esponja mojada o toallitas desechables para mascotas. En cuanto a la zona de los ojos, se debe limpiar con un algodón húmedo para evitar la acumulación de lagañas y por tanto infecciones o malestares en el perro.