BRASILIA.- El presidente Jair Bolsonaro protagonizó un nuevo furcio en su relación con Argentina, complicada tras el triunfo de Alberto Fernández en los comicios del pasado octubre, que fue rechazado enfáticamente por el mandatario ultraderechista, al punto que ayer confirmó que no enviará ningún representante a la asunción del líder del Frente de Todos (ver Brasil…).
Pero este desaire no fue todo: Bolsonaro dio la nota ayer al informar que tres empresas multinacionales, Honda, L’Oreal y MWM, le habían informado que cerrarían sus fábricas en Argentina para trasladarse a su país. “Es un nuevo gesto de confianza de los inversores para generar más empleos y un mayor crecimiento económico”, aseguró Bolsonaro en un mensaje que publicó en las redes sociales.
Sin embargo, rápidamente ejecutivos de dos de las compañías salieron a ratificar sus negocios en Argentina: Honda aseguró que mantendrá sus operaciones como estaba previsto y a partir de 2020 concentrará su producción en la línea de motocicletas; mientras que L’Oréal calificó a nuestro país como un “mercado estratégico”. “L’Oréal produce en Argentina cerca de 40 millones de unidades por año en sociedad con un productor local. No existe ningún plan para cambiar esto, de hecho nuestra ambición es continuar incrementando la producción local.
Argentina es un mercado estratégico para L’Oréal y la compañía está comprometida en acompañar el crecimiento económico del país”, destacó la firma en un comunicado. La brasileña MWM, a su vez, ya había cerrado su planta de fábrica de motores diésel en Córdoba en septiembre pasado.
Ante el evidente papelón, Bolsonaro borró el posteo apenas una hora después de publicarlo, pero su anuncio ya había circulado por los medios internacionales en un momento particularmente complicado para las relaciones entre Brasil y Argentina. Esto no fue todo además: la jornada se completó con otra mala noticia para el mandatario brasileño, pues su promocionada subasta de nuevas áreas petroleras para explotar en Brasil, promocionada como “la más grande del mundo”, terminó con una recaudación decepcionante luego de que muy pocas compañías internacionales hicieran ofertas y dos de los cuatro campos en juego no despertaran ningún interés. Además, la empresa que ganó la subasta fue la estatal Petrobras, que se quedó con los dos sectores licitados por 69.960 millones de reales (17.233 millones de dólares), muy por debajo de la ganancia de 106.500 millones de reales (26.228 millones de dólares) que el gobierno esperaba obtener con el supuesto negocio.
Todo esto ocurre mientras se conocía que la pobreza extrema en Brasil alcanzó en 2018 su mayor nivel desde 2012, con el 6,5% de la población (13,5 millones de personas) con ingresos menores a 1,9 dólares por día, según informó el propio Gobierno.
Deforestación imparable
BRASILIA.- Si bien el tema salió de los medios de prensa internacionales, la crisis ambiental del Amazonas no ha parado: según un informe del Instituto del Hombre y Medio Ambiente (Imazon), entidad no gubernamental que funciona en el estado de Pará, la deforestación del mayor bosque natural del mundo creció el 80% en septiembre en Brasil, en comparación con el mismo mes del año anterior.
Según datos satelitales analizados por el Imazon, el Amazonas perdió 802 kilómetros cuadrados en septiembre frente a los 444 kilómetros cuadrados del mismo mes del año anterior. El informe tiene en cuenta las zonas “desmatadas”, es decir, aquellas donde la flora y los bosques fueron totalmente eliminados. El estado más afectado fue Pará, en el extremo este amazónico, que representó el 53% del área perdida, seguido por Rondonia (13%), Amazonas y Acre (cada uno con el 11%).
Brasil enviará un ministro
BRASILIA.- El gobierno de Jair Bolsonaro negó ayer que el vicepresidente Hamilton Mourão vaya participar de la ceremonia de asunción del presidente electo en nuestro país, Alberto Fernández, el próximo 10 de diciembre, y apuntó que evalúa enviar a un ministro de bajo perfil. “Una vez que se reciba la invitación oficial del gobierno argentino, el presidente de la República designará a un ministro de Estado como su representante en la ceremonia, pero no será el vicepresidente”, informó la oficina de prensa de la Vicepresidencia de la República, en el Palacio del Planalto, en Brasilia.
Tras los comicios en Argentina, Bolsonaro lamentó el resultado en y se negó a felicitar a Fernández, a quien también le recrimina el apoyo que le dio públicamente al encarcelado ex presidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva.