SANTIAGO DE CHILE.- Con Brasil como epicentro mundial del coronavirus (ver principal), nuestra región experimenta una expansión acelerada de la pandemia en diversos países, aunque otras naciones como Uruguay navegan calmas hacia una normalización definitiva de su vida social y económica. Chile es sin duda uno de los países más complicados de la región, pues ayer volvió a tener un récord de fallecidos en 24 horas con 232 decesos y, pese a registrar una leve caída de los contagios diarios con más de 4.500 casos nuevos, decidió extender la cuarentena en la Región Metropolitana de Santiago, sumar nuevas zonas al aislamiento masivo y limitar los permisos de circulación.
Aún así, el ministro de Salud, Enrique Paris, descartó que vaya a disponerse una hibernación” en Santiago, como sugirió la ONG Espacio Público, y explicó que la capital debe mantener en funcionamiento los servicios básicos”. La Sociedad Chilena de Medicina Intensiva (Sochimi) aseguró además que Argentina sería una de las mejores alternativas para trasladar a pacientes de coronavirus con el objetivo de descomprimir el sistema hospitalario local, colmado en 98% según un informe reciente. El total de decesos llega a 3.615 personas y los casos positivos a 220.628.
Con el sistema sanitario colapsado en diferentes ciudades, Bolivia decidió encapsular” durante tres días a La Paz desde el sábado para intentar frenar los contagios de coronavirus, tiempo durante el cual no habrá circulación de ningún tipo”, ni de peatones ni de vehículos. En Perú, los crematorios de Lima llevan ya tres meses incinerando fallecidos por la enfermedad de forma ininterrumpida, 24 horas diarias y siete días a la semana, pese a lo cual tienen tantos cuerpos acumulados que la lista de espera llega a tres días. Con más de 237.000 contagios, y más de 7.000 fallecidos, el ministro del Interior, Gastón Rodríguez, adelantó ayer que el toque de queda nocturno en vigor desde marzo podría prolongarse hasta diciembre por la pandemia.