BRUSELAS.- Desde ayer, los cafés y restaurantes de Bélgica permanecerán cerrados durante cuatro semanas, mientras que el toque de queda nocturno inaugurado en París se extendió a Eslovenia que, al ver que los contagios se habían duplicado en una semana, anunció que los ciudadanos no podrán circular entre las 23 y las 6 del día siguiente.
En Reino Unido, Gales anunció que instaurará un confinamiento estricto de dos semanas a partir del viernes para sus 3.000.000 de habitantes, mientras que en España, la ciudad de Burgos se sumó a la región de Madrid y anunció un cierre perimetral que impedirá a sus 175.000 habitantes salir de la localidad.