El coronavirus ya contagió a más de 143,8 millones de personas en todo el planeta y causó la muerte de más de tres millones desde el inicio de la pandemia.
Sumida en una grave crisis sanitaria, India registró ayer 314.835 nuevas infecciones por coronavirus, un récord mundial que puso a los hospitales al límite de sus capacidades con una preocupante escasez de oxígeno medicinal.
Numerosos hospitales y clínicas de Nueva Delhi lanzaron de hecho un llamado desesperado al gobierno central para que suministre con urgencia oxígeno para cientos de pacientes que reciben ventilación pulmonar asistida.
Desde el lunes, la ciudad de 25 millones de habitantes está confinada por una semana. Con 2.074 muertes en la jornada, el balance oficial de la epidemia en India llegó a casi 185.000 decesos, la mitad de los 381.000 fallecidos registrados en Brasil.