El Gobierno de Alemania anunció ayer la realización de una conferencia internacional esta semana en Berlín sobre la crisis alimentaria vinculada a la guerra en Ucrania, con la presencia del jefe de la diplomacia de Estados Unidos, el secretario de Estado Antony Blinken.
La reunión “Unidos por la Seguridad Alimentaria Global” del viernes próximo se enfocará en la amenaza de una escasez de alimentos inducida por la guerra, según informó un vocero del Ministerio de Agricultura de Alemania, en momentos donde el titular del Organización del Atlántico Norte alertó que el conflicto armado puede “durar años”.
“El Gobierno está especialmente comprometido durante su presidencia del G7 para encontrar las respuestas conjuntas a la amenaza de una crisis mundial de hambre inducida por la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania”, indicó el funcionario; mientras la ministra de Relaciones Exteriores alemana, Annalena Baerbock, informó que la conferencia busca “estabilizar los suministros alimentarios en el mundo”. Esta conferencia se celebra además dos días antes del inicio de una cumbre del Grupo de los Siete (G7) en la región alemana de Baviera, presidido por Alemania.
Los países occidentales piden a Rusia que deje de bloquear los puertos del mar Negro para permitir que grandes cargamentos de granos lleguen a los mercados mundiales ante el creciente temor de que las regiones más vulnerables sufran una hambruna. Días antes, el alto representante de la Unión Europea (UE) para las Relaciones Exteriores, Josep Borrell, había llamado a trabajar con la ONU para evitar una “calamidad alimentaria” mundial debido al aumento del precio de los alimentos derivado de la guerra y el “impacto no deseado” de las sanciones impuestas a Rusia.
“La guerra de agresión injustificada y no provocada contra Ucrania pone al mundo en peligro de sufrir una hambruna que afecte a cientos de millones de personas”, aseveró el diplomático español, quien se manifestó “listo” para trabajar con la ONU y sus socios para evitar cualquier “impacto no deseado” de las sanciones contra Rusia en la seguridad alimentaria mundial.
Mientras tanto, Ucrania dijo ayer que los combates en la región del este que Rusia aspira a conquistar entraron en una fase “decisiva”, por lo que espera una mayor intensificación de los ataques durante esta semana.
La OTAN alerta por la extensión del conflicto
La guerra en Ucrania podría durar “años”, según advirtió el secretario general de la OTAN en una entrevista publicada por el periódico alemán Bild, en la que instó a los países occidentales a demostrar apoyo a Kiev mientras se prolongue el conflicto.
“Tenemos que estar preparados para que esto dure años”, alertó Jens Stoltenberg, quien enfatizó que “no debemos desfallecer en nuestro apoyo a Ucrania, incluso si los costos son altos, no solo en términos de apoyo militar sino también en el aumento de los precios de la energía y los alimentos”.
“Estos costos no son nada en comparación con los que pagan diariamente los ucranianos en la primera línea”, ponderó Stoltenberg, quien aseguró que si Rusia lograra sus objetivos en Ucrania, “tendríamos que pagar un precio aún mayor”.