En esta imprevista campaña legislativa en Francia, el presidente Emmanuel Macron lanzó una idea nueva ayer en conferencia de prensa para explicar su decisión. Ningún niño podrá utilizar un teléfono celular antes de los 11 años y no tendrán acceso a las redes sociales hasta los 15 años en el país.
La medida se adoptará luego de que especialistas y expertos entregaron al jefe de Estado en el palacio del Eliseo un informe de 125 páginas al final de abril, alertando de los peligros que implican este acceso temprano sobre los niños, sus hábitos, la violencia, la lectura, la obesidad y la sociabilidad.
Actualmente, el uso de teléfonos móviles en la escuela y la universidad está prohibido únicamente para los estudiantes en Francia. Además, los equipos educativos deben demostrar un uso razonable de sus dispositivos de comunicación, para permitir que los estudiantes comprendan plenamente la medida.
Este informe pericial recomienda prohibir el uso de pantallas a niños menores de tres años y del teléfono móvil a menores de 11, limitando estrictamente el acceso en años posteriores a los adolescentes. Allí hablan de una “hiperconexión que experimentan los niños”.
La comisión de diez expertos fue copresidida por el neurólogo Servane Mouton y la psiquiatra especialista en adicciones, Amine Benyamina. “La tecnología tiene la capacidad de emancipar a los niños, de liberarlos, porque les permite acceder más libre y fácilmente al conocimiento. Por primera vez, sobre un tema determinado, un niño puede saber más que sus padres, su maestro o su ministro. Pero, como todo lo que es moldeado por el hombre, la tecnología también tiene la capacidad de usarse para confinar, alienar y subyugar a los niños”, escribió el grupo en el preámbulo de su informe.
“Frente a la mercantilización de nuestros niños, la Comisión propone recuperar el control de las pantallas, devolver a los niños al centro de nuestra sociedad y permitirles crecer y triunfar en total libertad. Lo que hace rica a una nación es su juventud, y la nuestra no está a la venta”, finalizaron.