Finalmente y en cumplimiento con lo pactado el fin de semana pasado entre Rusia y Ucrania, comenzarán a exportarse los granos ucranianos varados en sus puertos a raíz de la guerra. Los cereales serán sacados por el mar Negro hacia el Mediterráneo a través del estrecho del Bósforo, en la ciudad turca de Estambul, donde personal de Naciones Unidas (ONU) y funcionarios turcos, rusos y ucranianos coordinarán las exportaciones antes de su salida a los mercados mundiales.
“En el marco de la firma del acuerdo sobre el desbloqueo de los puertos ucranianos para la exportación de cereales, los puertos de Odesa, Chornomorsk y Pivdennyi reanudaron su trabajo”, indicaron ayer desde Kiev. “La salida y la entrada de los barcos a los puertos marítimos se harán formando una caravana que acompañará al primer buque. Pero esto estará precedido por el arduo trabajo de los hidrógrafos”, agregó la Marina ucraniana.
El anuncio se produce unos días después de que Ucrania y Rusia, los mayores exportadores mundiales de cereales, firmaran sendos acuerdos en Estambul, bajo auspicios de la ONU, para aliviar la crisis alimentaria mundial y crear “corredores seguros” en el mar Negro. El acuerdo se vio comprometido el sábado tras un bombardeo ruso en Odesa que generó una oleada de condenas, aunque Moscú recalcó que estaba dirigido a la infraestructura militar y no debía obstaculizar la reanudación de los envíos.
El operativo incluye la inspección de los barcos para garantizar que lleven cereales y fertilizantes, y no armas. A su vez, los buques serán controlados en Turquía por reciente creado Centro de Coordinación Conjunta (CCC) que es dirigido por cinco representantes de Rusia, Ucrania, Turquía y la ONU, con miembros tanto militares como civiles. “Los que trabajen aquí saben que los ojos del mundo están puestos en ellos”, precisó el ministro de Defensa turco, Hulusi Akar.
Desde el inicio del conflicto, más de 20 millones de toneladas de granos estuvieron bloqueados en los puertos de la región de Odesa por la presencia de buques de guerra rusos y minas colocadas por Kiev para defender su costa. Ahora, los buques deberán esquivar esas minas, esparcidas para protegerse contra un asalto ruso.
Rusia vuelve a dejar sin gas a Europa
En un nuevo revés en torno a la crisis energética que atraviesa Europa por su dependencia al gas ruso, ayer la empresa estatal rusa Gazprom anunció el recorte del suministro al 20%.
Gazprom justificó la medida en la necesidad de realizar tareas de mantenimiento a una turbina del gasoducto Nord Stream, pero el hecho ocurre en medio de las tensiones por las sanciones de la Unión Europea (UE) a Moscú.
El martes, la UE confirmó que prolongará las sanciones vigentes por la invasión rusa a Crimea y sumó nuevas por la guerra en Ucrania.
Sobre el recorte, el vocero del Kremlin, Dmitri Peskov, dijo ayer que “hay menos posibilidades técnicas de bombear” debido a que las sanciones occidentales no permiten “realizar los mantenimientos técnicos, cambiar piezas, hacer reparaciones generales y otros trabajos reglamentarios a los equipos”.
El nuevo recorte afecta principalmente a Alemania, y también a otros países que se abastecen de Rusia. En tanto, el precio del gas en Europa alcanzó el martes su mayor récord desde marzo.