La conducción del oficialista Pacto de Unidad de Bolivia, que reúne a sectores del MAS y organizaciones sociales y se alinea con el presidente Luis Arce, volvió a conminar ayer a la dirección nacional partidaria, controlada por el ex mandatario Evo Morales, a que llame a un nuevo congreso nacional tras la anulación del realizado en octubre último.
“Hemos remitido dos notas a la (directiva) nacional del MAS para el cumplimiento y la convocatoria (de nuevo congreso); la tercera la estamos haciendo hoy. En caso de que no cumpla, nosotros, a la cabeza del Pacto de Unidad, vamos a convocar al congreso y cumpliremos también con todas normativas del Órgano Electoral”, advirtió Vidal Gómez, de la Confederación Sindical de Comunidades Interculturales.
El origen del conflicto es la división entre los sectores que responde a Arce, considerados “renovadores”, y los que se referencian en Morales. Este último grupo hizo en octubre un congreso en lauca Ñ, en Cochabamba, en el que designó al ex mandatario candidato para 2025 y consideró “autoexpulsados” a Arce y al vice David Choquehuanca. Semanas después, el Tribunal Supremo Electoral (TSE) declaró nulo ese encuentro y sus decisiones y dispuso que se haga uno nuevo.