El Gobierno ruso consideró hoy que la posible entrega de misiles de largo alcance a Ucrania por parte de Estados Unidos y Europa «no cambiará» nada y aseguró que Rusia continuará su ofensiva a toda costa.
El suministro de misiles con un alcance de 150 kilómetros conduciría «a un aumento de las tensiones, a una escalada (del conflicto)», dijo el vocero presidencial ruso, Dmitri Peskov.
«Significaría esfuerzos adicionales para nosotros, pero no cambiará el curso de los acontecimientos, la operación militar especial continuará», agregó.
Desde hace meses, Ucrania pide cientos de tanques pesados modernos, misiles de un alcance de más de 100 kilómetros y aviones para poder llevar a cabo contraofensivas capaces de reconquistar los territorios ucranianos ocupados por Rusia.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo ayer que hablaría con su homólogo ucraniano, Volodimir Zelenski, sobre sus necesidades de armas.
Ucrania dice que necesita misiles de alta precisión de más de 100 kilómetros de alcance para destruir las líneas de suministro y los depósitos de municiones de Rusia, la única manera de que Kiev pueda superar su déficit de tropas y armamento.
Hasta ahora, sus aliados occidentales se negaron a entregarle esos sistemas por temor a provocar una nueva escalada de la ofensiva rusa.
Pero tras semanas de dudas, los europeos y los estadounidenses dieron luz verde a las entregas de tanques pesados modernos, aunque el número sigue estando por debajo de lo que reclama Ucrania.
El ministro de Exteriores de Ucrania, Dmitri Kuleba, dijo ayer que recibirán entre 120 y 140 tanques modernos de modelos occidentales -Leopard 2, Challenger 2, M1 Abrams y, tal vez, también Leclerc- en una primera fase de entregas.
Esos suministros para Ucrania demuestran «una implicancia directa» de Occidente en el conflicto, sostuvo Rusia, que además advirtió que este tipo de envíos puede representar una escalada en el conflicto.
Estados Unidos anunció el plan de donar a Ucrania 31 tanques M1 Abrams.
Francia aún no se decidió a secundarlos con el envío de tanques Leclerc, pero Emmanuel Macron dijo que no excluye ninguna posibilidad.
España planea un primer envío de 4 a 6 carros de combate Leopard 2A4 a Ucrania, según publicó hoy el diario El País citando fuentes gubernamentales.
Reino Unido fue el primer país en anunciar el envío de tanques de diseño occidental a Ucrania. A mediados de enero pasado se supo que los británicos pondrán a disposición de Kiev 14 carros de combate Challenger 2.
Alemania, en tanto, confirmó que enviaría a Ucrania 14 tanques Leopard 2, además de autorizar el suministro de estos carros desde otros países.
Pero el canciller alemán, Olaf Scholz y su ministro de Defensa, Boris Pistorius, señalaron que Alemania «no va a suministrar cazas a Ucrania».
El vicecanciller de Alemania, Robert Habeck, rechazó hoy la idea de enviar cazas alemanes a Ucrania y recalcó que «ahora mismo es necesario entregar tanques Leopard, pero nada más que eso».
«No creo que esté bien suministrar aviones de combate a Ucrania. Y no ahora mismo, sino en general», aseguró, informó la agencia de noticias AFP.
Asimismo, remarcó la importancia de «no llevar a Alemania y a toda Europa a la guerra».
Según el Kremlin, estos carros de combate «arderán como los demás».
Rusia advirtió en reiteradas ocasiones que los países de la OTAN están «jugando con fuego» al suministrar armas a Kiev, y que los convoyes extranjeros con armas serían «objetivo legítimo» para su ejército nada más cruzar la frontera.
En tanto, el líder austriaco, Alexander Van der Bellen, de visita en Kiev, enfatizó hoy la defensa de los valores europeos.
Van der Bellen catalogó a las agresiones rusas de «crímenes contra la humanidad (…) que no deben ser olvidados y quedar impunes», durante un breve paso por Bucha, en las afueras de Kiev.
Por su parte, el primer ministro de Israel y líder de la coalición de ultraderecha sionista y ultraortodoxa que gobierno el país, Benjamin Netanyahu, dijo que estaba considerando entregar ayuda militar a Ucrania y servir como mediador, luego de que Estados Unidos pidiera un compromiso más activo.
Netanyahu no ha hecho compromisos firmes con Ucrania e Israel mantiene su relación con Rusia, que controla los cielos en la vecina Siria y ha ignorado los ataques israelíes contra objetivos de su archienemigo Irán.
El ministro de Exteriores de Israel, Eli Cohen, le dijo al secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, que viajaría a Ucrania para reabrir su embajada.