El primer ministro francés, François Bayrou, perdió el lunes el voto de confianza en la Asamblea Nacional francesa por su plan presupuestario que buscaba ahorrar 44.000 millones de euros (US$51.660 millones) anuales en el gasto público.
En un comunicado de prensa, el presidente, Emmanuel Macron, reconoció el resultado de la votación y dijo que “se reunirá mañana con el primer ministro François Bayrou para aceptar la dimisión de su gobierno”.
El ahora ex primer ministro, de 74 años, asumió el cargo en diciembre de 2024 a propuesta de Macron, y convocó la votación en un intento de recabar apoyo para un severo plan de reducción del gasto público, en un contexto de creciente endeudamiento estatal.
Según cifras oficiales, la deuda pública francesa ascendía a 3.345.800 millones de euros, o el 114% de su PIB, al cierre del primer trimestre de 2025.
Además del recorte presupuestario, la propuesta de Bayrou incluía la supresión de dos días festivos: el lunes de Pascua y el 8 de mayo, que conmemora el final de la Segunda Guerra Mundial en Europa.
Sin embargo, los legisladores de diferentes corrientes políticas aprovecharon la convocatoria para unirse y forzar su destitución, en lo que se considera un revés estratégico para el gobierno de Macron.
Según los resultados anunciados por la presidenta de la Asamblea Nacional, Yaël Braun-Pivet, Bayrou consiguió solo 194 votos a favor y 364 en contra, sobre 558 votos válidos.
En este contexto, Macron deberá nombrar a un nuevo primer ministro en los próximos días, el cuarto en menos de un año, profundizando así la incertidumbre política en la segunda mayor economía de Europa.