La variante del coronavirus Ómicrom ya estaba presente en 63 países del mundo para el 9 de diciembre, según advirtió la Organización Mundial de la Salud (OMS) en un nuevo informe donde alertó que la nueva cepa parece difundirse más rápido que la Delta.
El organismo rector de la salud mundial informó además que la expansión acelerada de Ómicrom no es exclusiva de Sudáfrica -donde Delta es menos prevalente-, sino también en el Reino Unido, donde aquella forma es la dominante. La OMS pronosticó que “Ómicrom superará a Delta en los lugares donde hay transmisión comunitaria”, a la vez que alertó que los pocos datos disponibles inducen a pensar que el perfil genético de Ómicrom “baja la eficacia (de las vacunas) con respecto a la protección de los contagios”.
El mejor ejemplo es el propio Reino Unido, que ayer elevó a Nivel 4 el estado de alerta debido a la difusión de la variante del Covid-19, retrotrayendo la situación al mes de mayo. La medida fue recomendada por las autoridades médicas de Inglaterra, Escocia, Gales e Irlanda del Norte, que tomaron la decisión ante la rápida expansión de los contagios de Ómicrom. Bajo la tipología sanitaria británica, el Nivel 5 es el de máxima gravedad, con riesgo de colapso de los servicios sanitarios por la pandemia, mientras el Nivel 4 refleja un “alto nivel de contagios”.
“Los datos sobre la gravedad estarán más claros en unas semanas, pero las hospitalizaciones por Ómicrom son ya una realidad y se prevé que se incrementen rápidamente”, indicaron las autoridades sanitarias, que pidieron a la población vacunarse, ponerse la dosis de refuerzo, mantener las habitaciones ventiladas, llevar mascarilla, hacerse pruebas a menudo y aislarse en cuanto tengan síntomas.
Ya el sábado, el grupo de expertos de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres advirtió que, en el escenario más optimista frente a Ómicrom, proyectan “una ola que podría llevar a un pico de más de 2.000 ingresos hospitalarios diarios, con 175.000 ingresos hospitalarios y 24.700 muertes desde diciembre al 30 de abril de 2022.
Esos cálculos, en el peor de los escenarios, se elevan hasta duplicar los registros de enero 2021 y “causar 492.000 ingresos hospitalarios y 74.800 muertes” en el mismo lapso de tiempo, por lo que los científicos llamaron a aumentar las restricciones sociales ya decretadas por el gobierno de Boris Johnson -que incluyen la reintroducción de las mascarillas en espacios cerrados, el teletrabajo y la obligatoriedad del Pase Sanitario para ciertos eventos-.
Alta tasa de contagios en Estados Unidos
El coronavirus no da respiro a Estados Unidos, que el sábado notificó 133.133 nuevos casos y 1.196 muertes en 24 horas, cifras alarmantes que mantienen al país como el epicentro mundial de la enfermedad.
Desde la aparición del virus en febrero de 2020, el número total de infectados en el país norteamericano subió a 49.593.113, casi el 15% de la población, de acuerdo a los Centros de Prevención y Control de Enfermedades (CDC).
Los estados más afectados son California con 5,12 millones de contagiados, Texas (4,33 millones), Florida (3,71 millones), Nueva York (2,7 millones) e IIlinois (1,87 millones). El temor crece ante la expansión de Ómicrom, que ya fue detectada en 10 de los 50 estados.
Rusia rebasó los 10.000.000 de casos
Las autoridades de Rusia confirmaron este domingo que el país ha rebasado el umbral de los 10.000.000 de contagios de coronavirus tras registrar casi 30.000 casos y 1.100 muertos durante el último día, en un balance publicado después de que los científicos del país secuenciaran cuatro cepas independientes de la variante Ómicrom.
El centro operativo para la lucha contra el coronavirus detalló que en las últimas 24 horas se detectaron 29.929 casos positivos y 1.132 decesos, lo que eleva las cifras totales desde el inicio de la pandemia a 10.016.896 afectados y 289.483 fallecidos, respectivamente.
La capital, Moscú, figura nuevamente como la ciudad con más casos y muertos, con 2.862 y 88, respectivamente, mientras que San Petersburgo notificó 2.012 positivos y 63 muertos.