Las Fuerzas Armadas de Israel afirmaron que completaron el cerco sobre la ciudad de Gaza y dejaron fracturada la Franja en dos zonas, una en el norte y otra en el sur. Las tropas israelíes “rodearon la ciudad de Gaza y ahora existe una Gaza sur y una Gaza norte”, dijo el vocero de las Fuerzas Armadas, Daniel Hagari, y aseguró que continuaría permitiéndose el tránsito de civiles desde el norte hacia el sur del enclave.
A casi un mes del inicio de las hostilidades entre Israel y el movimiento islamista palestino Hamás, los bombardeos israelíes en Gaza causaron la muerte de más de 10.000 personas, de las cuales casi la mitad son niños y niñas, según el Ministerio de Salud palestino. La cifra de 10.022 muertos fue anunciada ayer durante una conferencia de prensa en Gaza por el portavoz del Ministerio, Ashraf al-Qidreh.
Hasta ahora, 4.800 niños murieron por los bombardeos israelíes en la Franja de Gaza desde el comienzo del conflicto, provocado por la incursión de militantes de Hamás a Israel que el 7 de octubre mató a más de 1.400 personas y secuestró a unas 240, entre ellas una veintena de nacionalidad argentina.
En tanto, más de 70 camiones con asistencia humanitaria para los civiles de la Franja de Gaza entraron al enclave a través del cruce fronterizo de Rafah, en la frontera con Egipto, durante las últimas 24 horas. En un comunicado, el organismo del Ministerio de Defensa israelí que administra los asuntos civiles palestinos (Cogat) dijo que los 75 camiones que ingresaron en Gaza llevaban comida, agua potable e insumos médicos.
A su vez, David Cantero, coordinador general de Médicos sin Fronteras (MSF) en los territorios palestinos ocupados, aseguró que “la situación de los hospitales es catastrófica y dantesca”. Amputaciones sin anestesia general, vinagre como desinfectante de heridas y respiradores e incubadoras que deben ser apagados por falta de electricidad son algunos de los tantos problemas que tiene el personal sanitario que trabaja en el enclave palestino.