El ministro de Asuntos Exteriores de Noruega, Espen Barth Eide, consideró ayer que el reconocimiento de su país, junto con España e Irlanda, del Estado de Palestina es un apoyo para los palestinos y “una solución política para este conflicto”. Los tres países europeos oficializarán ese reconocimiento el 28 de mayo, una fecha que no es casual: “Unos días antes hay varias reuniones en Bruselas relativas a Palestina e Israel. El objetivo es apoyar un plan de paz en la región”, explicó el político laborista.
Consultado por el momento en que se da la iniciativa, Eide respondió: “El momento perfecto nunca se ha dado. Hasta hace poco, pensábamos que debía ser un acuerdo bilateral, resultado de un proceso negociado. Pero la situación en el terreno es peor que nunca. Ahora vemos la oportunidad de crear una esperanza de paz. Varios países árabes, junto con algunos europeos, han lanzado la idea de que se puede combinar un proceso irreversible hacia un Estado palestino con garantías firmes de seguridad para Israel; fomentando el fortalecimiento de la Autoridad Nacional Palestina y con la desmovilización de Hamás”.
Y continuó: “No todo va a cambiar al día siguiente. Pero esto da peso a Palestina ante futuros acuerdos. En los últimos años, ha habido una relación muy desigual entre Israel y Palestina. Por eso creo que este reconocimiento es constructivo”.
Y agregó: “La existencia de Hamás se basa en la falta de progreso de un Estado palestino. Si hubiera uno, con instituciones democráticas, con servicios de seguridad, con control interno… En cambio, la ausencia de solución ha creado una frustración de la que Irán y sus proxys [afines] se están aprovechando. Si establecemos un Estado palestino, basado en el acuerdo y el diálogo, las fuerzas terroristas puede que no desaparezcan, pero se mitigarían, se desmovilizarían”. Y cerró esperanzado con que otros países imiten la iniciativa de Oslo, Madrid y Dublín: “Estamos muy convencidos de que habrá otros Estados que en breve seguirán nuestro ejemplo”.
“Consecuencias graves”
“La decisión retorcida de sus gobiernos es una recompensa para Hamás; Hamás les felicita por ello. La decisión tendrá consecuencias más graves para nuestras relaciones con sus países”. Con estas palabras, el director general del Ministerio de Exteriores de Israel, Yaakov Blitshtein, reprendió ayer a los embajadores de los tres países europeos -España, Irlanda y Noruega- que anunciaron en la víspera el reconocimiento del Estado de Palestina la próxima semana.
La convocatoria es una de las medidas que había adelantado el titular de la cartera, Israel Katz, junto con la llamada a consultas de los representantes diplomáticos de los tres Estados.
Luego, la diplomacia exhibió a los embajadores una versión reducida del vídeo del secuestro de las soldadas que vigilaban la base de Nahal Oz durante el ataque del 7 de octubre.
Más negociaciones
El gabinete de guerra israelí dio luz verde a la reanudación de las negociaciones para conseguir la liberación de los rehenes retenidos en Gaza, donde ayer el ejército llevó a cabo nuevos bombardeos.
La decisión fue tomada después de que se difundiera un video de cinco mujeres soldados israelíes siendo secuestradas el 7 de octubre, día del ataque de Hamás en Israel que desencadenó la guerra.
En respuesta al video, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, reiteró que seguirá luchando contra Hamás para “garantizar que lo visto en esta noche no vuelva a ocurrir”.
Su gabinete de guerra, que se reunió por la noche del miércoles, “ordenó al equipo de negociadores regresar a la mesa para conseguir el regreso de los rehenes”, indicó un alto funcionario del gobierno.