El Gobierno colombiano pactó un alto al fuego por seis meses con los cinco principales grupos guerrilleros del país, incluido el Ejército de Liberación Nacional (ELN), anunció el presidente Gustavo Petro, quien se había propuesto como objetivo lograr la “paz total” desde que asumió hace cinco meses.
“Hemos acordado un cese bilateral con el ELN, la Segunda Marquetalia, el Estado Mayor Central, las AGC (Autodefensas Gaitanistas de Colombia) y las Autodefensas de la Sierra Nevada desde el 1 de enero hasta el 30 de junio de 2023, prorrogable según los avances en las negociaciones”, indicó Petro en un tweet.
A partir de esto, se suspende toda acción ofensiva, para así evitar cualquier tipo de incidente armado entre la fuerza pública y las organizaciones, algo que prevé la pacificación de las regiones de Arauca, Santander, Caquetá, Putumayo, Chocó, Cauca y el nordeste antioqueño, donde los grupos armados tienen su mayor influencia, y los delitos y ataques a la población civil son más frecuentes. El Gobierno decretará la duración y condiciones del cese del fuego con cada una de las organizaciones por separado.