El presidente de Rusia, Vladimir Putin, aseguró este viernes que son «infundadas» las acusaciones contra su país al que se culpa de los problemas mundiales en el suministro de productos agrícolas, por su decisión de invadir Ucrania, mientras Occidente busca alternativas para afrontar una potencial crisis alimentaria.
En una llamada telefónica con el canciller austríaco, Karl Nehammer, Putin «subrayó que los intentos de culpar a Rusia por las dificultades en el suministro de productos agrícolas en los mercados mundiales son infundados», aseguró el Kremlin en un comunicado que replicó parcialmente la agencia de noticias AFP.
«Se ofrecieron explicaciones detalladas sobre las causas reales de estos problemas, que surgieron por las sanciones anti-rusas implementadas por Estados Unidos y la Unión Europea, entre otros», añadió. Putin también pidió a Ucrania desminar los puertos «lo antes posible» para permitir el paso de los buques de transporte de grano y acusó a Kiev de «sabotear» las conversaciones con Moscú, según el Kremlin.
La ofensiva rusa en Ucrania y las sanciones occidentales interrumpieron el suministro de fertilizantes, trigo y otros productos básicos de ambos países, lo que incrementa la preocupación por una crisis alimentaria en todo el mundo. Rusia y Ucrania producen un 30% del trigo mundial.
La misma preocupación estuvo entre los temas que abordaron ayer en una conversación telefónica el presidente francés Emmanuel Macron y su par turco, Recep Tayyip Erdogan, quienes hicieron hincapié en «la urgencia de retomar las exportaciones de cereales ucranianos», bloqueados por la guerra y sobre las «diferentes formas posibles de transportar» estos cereales, junto con la ONU.
Ayer, Putin habló también con el primer ministro italiano, Mario Draghi y le dijo que Moscú estaba dispuesto a aportar una «contribución significativa» para evitar una crisis alimentaria si occidente levanta las sanciones. El presidente ucraniano, Volodomir Zelenski, se comunicó hoy también con Draghi a quien informó «sobre la situación en el frente» y le manifestó que esperan «más apoyo de defensa» de quienes denominó «nuestros socios». «Se planteó el tema del suministro de combustible. Se discutieron formas de prevenir la crisis alimentaria. Tenemos que desbloquear puertos juntos», dijo el mandatario en su cuenta de Twitter.
Por su parte, desde Roma comunicaron luego de la llamada que «el primer ministro aseguró el apoyo del Ejecutivo italiano a Ucrania en coordinación con el resto de la Unión Europea». «Ambos mandatarios debatieron las perspectivas de desbloquear las exportaciones de cereal de Ucrania para hacer frente a la crisis alimentaria que amenaza a los países más pobres del mundo. El presidente Zelenski agradeció el compromiso del gobierno italiano y acordó con el presidente Draghi seguir debatiendo posibles soluciones», añadió el comunicado oficial.
Draghi pidió ayer a Putin que permitiera la exportación de cereal a través de los puertos del Mar Negro para evitar una crisis alimentaria en los países más pobres, a lo que Putin señaló que «no es suficiente para resolver la crisis alimentaria mundial». «Los puertos están minados para evitar que los barcos rusos ataquen a Ucrania», expresó ayer Draghi en una rueda de prensa.
Italia está organizando un Diálogo Ministerial con los países mediterráneos para el próximo 8 de junio, en colaboración con la FAO, la agencia de la ONU encargada de la alimentación, para evaluar medidas de intervención para enfrentar esta problemática en el Mediterráneo y África.