Rusia y China reaccionaron rechazaron ayer la declaración de la cumbre de la OTAN en Washington, que sostuvo que la adhesión de Ucrania a la Alianza es “irreversible” y advirtió a China que “deje de apoyar a Moscú”. El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, afirmó que la declaración de la cumbre de la OTAN en Washington representa “una grave amenaza a la seguridad de la Federación Rusa” y que, por tanto, como respuesta serán necesarias “medidas meditadas, coordinadas y eficaces para contener a la OTAN”.
El vocero del presidente Vladimir Putin criticó que los aliados de la OTAN hayan acordado el término “irreversible” para definir el camino de Ucrania hacia la adhesión a la Alianza, a la que acusó de desplazar “progresivamente” su “infraestructura militar” hacia las fronteras rusas.
“Si simplificamos un poco la redacción de la decisión de la OTAN de que Ucrania se convertirá permanentemente en miembro de la alianza con el tiempo, entonces es obvio que la alianza persigue uno de sus principales objetivos: la supresión de Rusia, infligir una derrota estratégica para Rusia”, afirmó Peskov. E
n Washington, “la Alianza del Atlántico Norte ha confirmado una vez más claramente su esencia”, subrayó Peskov, que definió a la OTAN como “una alianza creada en una era de conflicto con el objetivo de mantenerlo. Las tensiones se están intensificando en el continente europeo”, advirtió.
Finalmente, China instó a la Organización a dejar de “incitar a la confrontación” después de las acusaciones formuladas por la Alianza contra Beijing por su provisión de ayuda crucial a Moscú en su invasión de Ucrania. “La OTAN debería dejar de glorificar la llamada ‘amenaza china’, dejar de incitar al conflicto y la rivalidad y contribuir más a la paz y la estabilidad en el mundo”, dijo en un comunicado un portavoz de la misión china ante la Unión Europea.